"Celeste pareja asesina"

BUENOS AIRES (ANSA).

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Nuevo modelo en la región, el fútbol uruguayo celebra su gran momento con el arribo a la final de la Copa América, en un proceso que mezcla la vieja garra charrúa y una dupla de ataque de primer nivel mundial, integrada por Diego Forlán y Luis Suárez. "Desde 2006 desarrollamos un proyecto de trabajo que se llama Institucionalización de los Procesos de las Selecciones y la Formación de sus Futbolistas. Es un plan integral que incluye estudiar, jugar, competir y saber de fútbol. Es la base de lo que disfrutamos ahora", explicó el DT Óscar Tabárez.   

Apodado el "Maestro", porque fue docente de escuela, Tabárez contó que el nuevo proceso formó "sin quemar etapas" a jugadores como Luis Suárez, Edison Cavani, Martín Cáceres, Diego Lodeiro, Sebastián Coates, Abel Hernández y algunos otros y que así "llegaron en el momento justo al seleccionado".

"Esto es algo que vimos en otros países y lo llevamos a cabo con éxito en Uruguay", dijo Tabárez, de 64 años, quien fue DT de Uruguay en el Mundial de Italia 90, dirigió a Milan y Boca Juniors, entre otros equipos, y logró un notable cuarto puesto en el último Mundial de Sudáfrica 2010.

No podía ser segundo

"Considerando los condicionantes que tenemos como país y la realidad futbolística, es imprescindible continuar con este tipo de trabajo. En el pasado nos creíamos muy especiales por lo que habíamos ganado y decíamos tonterías, como que un uruguayo no podía ser segundo, que era un fracaso, que solo servía ser campeón o nada", siguió Tabárez.

"Pero cambiamos esa mentalidad. Hoy niños, adolescentes, jóvenes y personas de 40 años tienen una nueva manera de ver las cosas. Por ejemplo, en el Mundial de Sudáfrica 2010 mucha gente salió a festejar un cuarto puesto. No fue necesario salir campeones para sentirnos orgullosos. Le devolvimos la alegría a la gente", afirmó. Fiel a su estilo, lejos de cualquier estridencia, Tabárez dijo, tras vencer 2-0 a Perú en semifinales, que no quería hablar "del título número 15 ni de nada por el estilo. Queremos ser campeones, lógicamente, pero no perdemos el tiempo en esas cosas", expresó.   

"Ya no pensamos más que ser segundo es un desastre. Sabemos que podemos ganar o perder. Ahora vamos a jugar una final e intentaremos ganarla, aunque no sabemos si podremos hacerlo, veremos qué pasa el domingo", dijo sobre la final.
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