/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/GCTT6ICYJRHQ5BE4UXJXMG2NFM.jpg)
Cargando...
El primer tiempo comenzó con mucho dinamismo y velocidad. Olimpia quiso asfixiar de entrada al rival, generó algunas aproximaciones importantes por los costados, pero de a poco se fue apagando ante un Rubio Ñu, que tenía el libreto muy claro, cerrar los espacios y con apenas dos o tres toques llegar hasta la portería de Campestrini.
Las zonas claves en donde Rubio Ñu sacó clara ventaja fueron en el mediocampo y en la ofensiva. Los volantes ñuenses pisaron con mucha más fortaleza y decisión ante una confundida línea de volantes del franjeado. Guerreño casi no pesó con el perfil cambiado, Vargas aportó más fuerza que claridad y Cristian Riveros pasó prácticamente desapercibido. En ofensiva, el Claudio Correa y Nery Cardozo pesaron mucho más que los atacantes del franjeado. Mientras el “Ogro” arrastraba la marca, Cardozo siempre picaba en solitario.
El Decano comenzó con todo, apenas al minuto de juego ya llegó hasta Santilli. Tras un pase de Aranda, Guerreño ensayó un remate, que fue bien controlado por el portero albiverde. A los 6', Claudio Vargas remató desde ángulo cerrado y nuevamente apareció el guardameta ñuense.
La primera ocasión del equipo de Alicio Solalinde fue un zurdazo de Correa, que fue despejado espectacularmente Campestrini y del rebote Alonso mandó al córner, cuando Cardozo venía atropellando. Jugada siguiente, tras un córner de Espinoza, el zaguero Celso González Ferreira ganó en el corazón del área y con un testazo venció la resistencia de Campestrini para poner el 1-0.
A partir de ahí, Olimpia fue dueño absoluto del balón, pero como viene ocurriendo de un tiempo a esta parte, cuando el Franejado está en desventaja, los murmullos en las gradas comienzan a aparecer, el equipo es poseído por la ansiedad y no aparece el hombre que se encargue de generar ideas. Rubio Ñu asustó con dos remates de un despierto Nery Cardozo, uno muy cerca del travesaño y el otro controlado por el portero decano.
Como se esperaba, Nery Pumpido, DT franjeado, se arriesgó en la complementaria, sumó un atacante más y un volante con mayor vocación ofensiva como Iván Torres. Pero los argumentos fueron tan reiterativos, que a pesar de crear esa sensación de peligro, nunca pasó de eso. Olimpia abusó de los centros, muy fáciles de despejar por cieto para las torres albiverdes, Julio Manzur y Celso González Ferreira.
La ocasión más clara de empatar fue un cabezazo de Carlos Acuña, que fue despejado sobre la raya por Gustavo Giménez, quien había quedado en el primer palo tras un tiro de esquina. En los últimos minutos Rubio Ñu se replegó totalmente, más aún con la expulsión de Diego Ciz por doble amonestación, pero el Franjeado no tuvo otro argumento que no sean las pelotas aéreas.
El rendimiento de Olimpia preocupa en su primer juego oficial, fue anulado por un impecable orden táctico de Rubio Ñu y comienza desperdiciando los primeros tres puntos. Para el albiverde son puntos de “oro”, pues no hay que olvidar que su primer objetivo será olvidarse del promedio.