Un valioso empate de Huracán en la Copa

BELO HORIZONTE. El modesto Huracán argentino sorprendió al Cruzeiro y se llevó un valioso empate sin goles del estadio del actual bicampeón brasileño, y se situó segundo del asequible Grupo 3 de la Copa Libertadores.

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El Cruzeiro, el equipo más potente del grupo, fue perdiendo la paciencia ante la defensa cerrada de los argentinos, que siempre vieron con buenos ojos llevarse un empate del Mineirao. En un juego trabado y marcado por la falta de definición de los brasileños, el único gol que se vio fue el anulado a Leandro Damiao a los 5 minutos de juego.

Los de Marcelo Oliveira salieron con garra al gramado del Mineirao dispuestos a cumplir con el guión establecido: deshacerse sin problemas del Huracán, recién ascendido a la primera división argentina, y asumir el liderato de un grupo que, desde el sorteo, estaba llamado a dominar.

Pero enfrente se encontró a un rocoso Huracán, que logró arruinar las sucesivas ocasiones que ideó la ’Raposa’ gracias a su planteamiento defensivo y a las atajadas in extremis por Giordano, el más exigido de los argentinos.

La partitura de la trabada primera parte habría sido completamente diferente si el juez paraguayo no hubiera señalado fuera de juego de Marquinhos en el pase de gol a Leandro Damiao.

Pero por entonces, apenas arrancado el partido y con el Cruzeiro con las riendas del juego, la contrariedad no parecía tan grave, ya que el gol de los locales parecía ser cuestión de tiempo.

Cada vez que los brasileños articulaban un ataque ponían en serios aprietos a los de Néstor Apuzzo, y en especial si el talentoso medio De Arrascaeta estaba de por medio.

El joven uruguayo, que con 20 años es uno de los refuerzos más prometedores del Cruzeiro, casi adelanta a su equipo con una espectacular volea desde el corazón del área a pase de Mayke, que se fue fuera por muy poco.

Más tarde la tendría Willian, que se hizo un lío al recibir desmarcado un balón rechazado por la defensa del Huracán.

A la desesperación de los brasileños, el ’Globo’ respondió con un juego conservador mostrando desde el principio que un empate era un gran resultado que llevarse de Belo Horizonte.

La mejor ocasión del Huracán llegó con un remate elevado de Ramón ’Wanchope’ Ábila, que el árbitro señaló como fuera de juego.

Guiados por la efectividad de su planteamiento, los de Néstor Apuzzo no variaron su propuesta en la segunda parte y consiguieron desquiciar a un Cruzeiro al que le acabaron comiendo las prisas.

La afición del Mineirao, escenario del fatídico 7-1 encajado por Brasil ante Alemania en el Mundial-2014, llegó incluso a temer que ésta volviera a ser otra noche de los horrores en Belo Horizonte cuando Ramón ’Wanchope’ Ábila estuvo a punto de culminar un rápido contraataque que hizo a Fabio dejar atrás su portería.

Dos minutos después sería un rebote aprovechado por Montenegro el que ahogó los gritos de los más de 27.000 aficionados que acudieron a animar al Cruzeiro.

Un tiro a la escuadra de Damiao y los destellos del joven Judivan, que entró sustituyendo a De Arrascaeta en el 67 y rozó el gol en tres ocasiones, fue lo máximo que logró el Cruzeiro antes del pitido final.

Campeón de la Copa Libertadores en 1997 y finalista en 2009, el equipo de Marcelo Oliveira no puede permitirse más concesiones si quiere meterse en los octavos de final.

Tras la victoria a domicilio del boliviano Universitario horas antes frente al Mineros venezolano (0-1) , los bolivianos se sitúan como sorprendentes líderes del Grupo 3, con cuatro puntos.

Empatados con dos unidades le siguen el Huracán y el Cruzeiro, mientras que los venezolanos quedan rezagados con un punto.

En la última fecha de la primera vuelta del Grupo 3, el cuadro estudiantil de Sucre recibirá el próximo martes a Huracán, mientras que el Cruzeiro visitará a Mineros en Puerto Ordaz el jueves 19 con la obligación de lograr su primera victoria en esta Libertadores.

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