El domingo aparece el libro sobre el Cnel. Rafael Franco

El coronel Rafael Franco vivió intensamente la vida como militar, guerrero legendario, héroe y luego político y presidente de la República.

Rafael De la Cruz Franco Ojeda, hijo de Federico Franco y Marcelina Ojeda, nació en el populoso barrio Santísima Trinidad, de Asunción, el 22 de octubre de 1896. Fallecería en nuestra ciudad capital el 15 de septiembre de 1973, a la edad de 77 años.

Ejerció la presidencia del Paraguay entre el 20 de febrero de 1936, cuando asumió luego del golpe del 17 de febrero de ese año, y el 13 de agosto de 1937, fecha en que fue derrocado por un contragolpe militar.

Franco fue protagonista esencial de la agitada vida política paraguaya del siglo pasado. Tuvo participación en las guerras intestinas desde la segunda década del siglo XX. Su carácter exaltado y díscolo lo llevó a separarse del ejército poco antes de la contienda del Chaco, pero se reintegró y sobresalió como soldado y jefe en la guerra contra Bolivia.

Llegó a la cúspide del poder en 1936 cuando ejerció la presidencia de la República por 18 meses. Conoció la crueldad del destierro a consecuencia de la intolerancia que caracterizó a la política paraguaya. El coronel Rafael de la Cruz Franco Ojeda fue, sin duda, un revolucionario, afirma el autor del libro biográfico, Erasmo González.

Por su parte, el director de la colección “Personalidades Célebres”, Herib Caballero Campos, afirma en el prólogo que “este libro sobre la vida de un gran líder político paraguayo es un aporte más de la colección”.

Expresa además que el autor, Erasmo González, es un conocedor del proceso político que comenzó en 1936 y que justamente estuvo liderado por el coronel Franco.

El libro comienza ubicándonos en el período en el cual transcurrió la niñez y la adolescencia de Franco, quien era hijo de un profesor de matemáticas. Luego va relatando cómo inició su carrera militar, integrando la primera remesa de oficiales egresados de la Escuela Militar del Paraguay.

La obra transcurre describiendo las diversas etapas de la vida del oficial Franco, quien por sus propios méritos asciende en el escalafón militar y participa de la Guerra Civil de 1922 en defensa del gobierno encabezado por el doctor Eusebio Ayala.

Posteriormente el autor describe parte de su pensamiento en cuanto a las tensiones con la República de Bolivia por la ocupación del Chaco y cómo actuó el entonces mayor Rafael Franco al capturar y destruir el fortín boliviano Vanguardia, lo que provocó el rompimiento de relaciones y la movilización general de 1928, momento álgido en el que casi estalló la guerra entre ambas naciones.