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Una ráfaga impresionante del equipo de Libertad, en el inicio del partido, con la frescura, la capacidad goleadora y calidad técnica de Mauro Caballero, quien en dos minutos (4 y 6) marcó dos golazos para entusiasmar a los escasos hinchas gumarelos que fueron a despedir a su equipo del presente torneo.
Con lo expuesto en esos minutos, parecía que el Independiente no tenía ninguna chance de lograr siquiera el empate, ya que el dominio local no cesaba, pero las definiciones ya fueron de lujo y dejaron pasar algunas ocasiones para ampliar la diferencia.
La visita no salió de su argumento, y con la solidez y calidad de Fidencio Oviedo, se hizo del mediocampo y terminó dominando el juego en el primer tiempo.
La etapa final siguió de la misma manera, Libertad echado atrás y pescando el contragolpe, y todo Independiente yendo en pos del descuento, que llegó por intermedio de Emanuel Biancucchi, de un formidable tiro libre.
A medida que pasaban los minutos, Independiente varió su esquema, buscando con los centros llegar al empate, más aún con la presencia de Julio Aguilar, quien mostró toda su capacidad de cabeceador, especialmente cuando le cedió el esférico a "Makanaki" Dos Santos, para marcar el justiciero empate, cuando terminaba el partido, quien lo festejó con un chupete en la boca, en homenaje a su nuevo hijo.
Castigo para un Libertad que muy rápido se conformó y premio para un Independiente que ratificó por qué permanece en la categoría.
Con lo expuesto en esos minutos, parecía que el Independiente no tenía ninguna chance de lograr siquiera el empate, ya que el dominio local no cesaba, pero las definiciones ya fueron de lujo y dejaron pasar algunas ocasiones para ampliar la diferencia.
La visita no salió de su argumento, y con la solidez y calidad de Fidencio Oviedo, se hizo del mediocampo y terminó dominando el juego en el primer tiempo.
La etapa final siguió de la misma manera, Libertad echado atrás y pescando el contragolpe, y todo Independiente yendo en pos del descuento, que llegó por intermedio de Emanuel Biancucchi, de un formidable tiro libre.
A medida que pasaban los minutos, Independiente varió su esquema, buscando con los centros llegar al empate, más aún con la presencia de Julio Aguilar, quien mostró toda su capacidad de cabeceador, especialmente cuando le cedió el esférico a "Makanaki" Dos Santos, para marcar el justiciero empate, cuando terminaba el partido, quien lo festejó con un chupete en la boca, en homenaje a su nuevo hijo.
Castigo para un Libertad que muy rápido se conformó y premio para un Independiente que ratificó por qué permanece en la categoría.