Cargando...
Nacional es el segundo en la tabla de posiciones y necesitaba ganar para generar preocupación en el líder. Lo intentó, pero erró los caminos y sobre el final estuvo muy cerca de quedarse con las manos vacías, ante la buena imagen que proyectó esta vez el Sportivo Luqueño.
Un nuevo rostro mostró el Auriazul
Era la ocasión para volver a vivir una fiesta en casa, como varias anteriores en esta campaña, pero a Nacional le faltaron varias de sus armas principales para lograrlo. La solvencia defensiva, excepto la del portero Don, no se hizo ver en la tarde de sábado por barrio Obrero, como tampoco el orden de Marco Riveros y el desequilibrio de Ariel Bogado. Con la lucha incansable de Víctor Aquino, alcanzaba para generar algo, ante una también dubitante zona defensiva auriazul, donde se llegó al colmo de unos pechazos entre Rober Servín y el arquero Villasantti, luego de una pelota complicada que aquel intentó ceder al portero.
El primer tiempo, con una temperatura que aplastaba hasta los que observaban el juego bajo sombra bebiendo tereré helado, no dejó mucho para analizar, salvo la inesperada decisión de Amarilla, DT auriazul, de sacar a Vargas, que no estaba jugando mal, para poner a Escalante, cuando faltaba solo un minuto para ir al descanso.
Pero "Tacuara" acertó, porque Escalante fue el socio que necesitaba Milton Benítez para jugar y entre ambos generaron varias jugadas claras, sobre todo tres que quedaron en los pies de Milton para definir y que su mala puntería, un achique de Don y un cruce milagroso de Ruiz Peralta, le cerraron el camino a una victoria auriazul que a esa altura hubiera estado plenamente argumentada. Nacional ya era solo voluntad, principalmente de los que entraron en el segundo tiempo, pero sin modificar en gran medida la imagen cansina y equívoca que dio esta vez la Academia.
Punto que celebra la visita
La paridad generó muchos nervios en los hinchas locales, algunos de los cuales se despacharon con airadas quejas que alcanzaron al DT Juan Manuel Battaglia, pero fue recibida con agrado por los adictos al Luqueño, que le dieron una "triunfal" despedida al equipo, que estuvo cerca de ganar en el segundo tiempo. "Nos faltaba esto, ganar en confianza. Creo que jugamos bien en la parte final", dijo Milton Benítez, delantero auriazul que tuvo tres ocasiones claras para anotar.