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“Increíble cómo la pelota no quiso ingresar al arco de Cerro Porteño. Montón de situaciones tuvimos a lo largo del partido y no se pudo meter adentro el esférico. Se hizo un gran despliegue futbolístico y físico, pero no alcanzaron para evitar la derrota”, señaló un dolorido Eduardo Aranda al término del encuentro. Agregó: “Pusimos garra, entrega, temperamento y todo lo que pudimos. El rival aprovechó un penal y al final nos ganó”.
Cristhian Ovelar, quien también tuvo algunas apariciones en el área cerrista: “El segundo tiempo prácticamente jugamos en campo de Cerro Porteño. Los llevamos hasta su área, pero faltó la puntada final”.