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Comenzaron vendiendo 100 litros de leche por día y trabajando en familia, con cinco personas. Hoy procesan 60.000 litros de leche por día, trabajan con 383 empleados en forma directa y con más de 200 productores de leche.
La historia de la empresa familiar Doña Ángela está trazada por un inicio desde abajo y con esfuerzo, lo que permite hoy a sus fundadores recordarla con orgullo. “Teníamos que crear la industria para darnos fuente de trabajo a nosotros mismos y a nuestros hijos”, comenta la gerente general de Doña Ángela y hermana mayor de los Figueredo, Diana, quien manifiesta que cumplir 30 años com o industria es poco, pero que llegar a esto no fue fácil.
“Primero fuimos productores primarios, con eso nos relacionamos con gente de todos los estratos sociales. Cuando tuvimos gran producción, pusimos la industria. Y estamos cumpliendo 30 años con una nueva etapa que se está iniciando, para dejarle esta empresa a la tercera generación”, dice.
Por su parte, María Luisa Figueredo recuerda que comenzaron entre hermanos la industria y se dividieron los trabajos de acuerdo a sus aptitudes. “Diana es ingeniera agrónoma y comenzó con la parte productiva; yo, arquitecta de profesión, me metí en la parte administrativa, y José, que es abogado, en la parte de maquinaria, mientras que Felipe se abocó a la producción primaria en el campo”, relata. Ya luego sus hijos fueron acoplándose al trabajo desde muy jóvenes.
“Nuestros padres, el capitán de Caballería Federico Camilo Figueredo (recientemente fallecido) y doña Ángela Nicora, nos daban el apoyo financiero y moral, ellos tuvieron la idea de dar el salto al sector industrial”, añade. Mercedes, otra de las hermanas Figueredo, reconoce que salir de la granja y llegar a Asunción era trabajo de todo el día, que lo hacían a la par de estudiar. Esta labor la realizaron durante 20 años, tiempo en que el tambo se fue agrandando y se hizo imposible seguir repartiendo casa por casa.
“Acá pasamos de todo, incendio, accidentes de tránsito, pero todo pudimos afrontar y hoy tenemos una fábrica con maquinarias europeas que procesan 60.000 litros de leche por día, y con una capacidad de producción de 100.000 litros”, comenta orgullosa la gerente general.
Asimismo, Felipe Figueredo destaca que la historia de la empresa está relacionada a la historia de la lechería en este país.
De los seis hermanos, cinco están activos en la empresa, cada uno con sus respectivos hijos y nietos insertados en la producción.
También José Figueredo, uno de los directivos de la firma, resaltó el efecto multiplicador que tiene la lechería, porque trabajan con proveedores, que son otras industrias, y luego también está la comercialización.
Fabrican más de treinta productos
Doña Ángela, nombre de la marca en honor a doña Ángela Nicora de Figueredo, madre de los fundadores de la empresa, ofrece actualmente más de 30 productos de derivados lácteos, de los cuales el más reciente es el helado.
“Para tener esta planta tuvimos que viajar mucho. Yo recorrí ocho países europeos para ver las plantas lácteas, mediante el apoyo del Gobierno francés y hacer realidad esta fábrica”, comentó José Figueredo, directivo de la empresa.
Agro Industrial Guarapí SA cuenta con una planta industrial ubicada en Villeta, a 30 kilómetros de Asunción, donde cuenta con una propiedad de 32 hectáreas, de las cuales casi 10.000 m2 corresponden a la superficie construida. El equipamiento de la fábrica es de origen francés, con algunas maquinarias de Argentina y Paraguay también.
Tiene 12 locales propios, en los que se vende el 60% de su producción, lo que le permite tener liquidez y que a su vez le significa mayor agilidad comercial y mejor cumplimiento con los proveedores.
“Gran parte de lo que hacemos es el yogur, en sus diversas variedades. El 50% es yogur y el resto leche y postres, como dulce de leche, flan, arroz con leche y helado”, indicó el empresario.
“La calidad del producto empieza dentro de la vaca, que nos aseguramos que sea sana y trabajamos con trazabilidad. Y así damos trabajo a miles de productores y su personal en el campo”, resalta.