Los promotores del proyecto de ley inconstitucional, a favor de Petropar

El proyecto original “De fomento al consumo de alcohol y carburante” tiene el sello de mesa de entrada el 9 de octubre de 2014, con el número de expediente S-146586 y fue presentado por senadores de diferentes partidos políticos, como Arnaldo Giuzzio (Partido Democrático Progresista - PDP), Blanca Fonseca (PLRA), Sixto Pereira (Frente Guasu - FG), Arnoldo Wiens (ANR), Gustavo Alfonso (ANR), Carlos Amarilla (PLRA), Nelson Aguinagalde (ANR) y Miguel Ángel López Perito (Avanza País).

Lo llamativo del proyecto es que, básicamente, buscó fomentar un mayor consumo de alcohol carburante (ver infografía), y en el que aparecen apenas tres artículos básicos de un total de cinco.

Sin embargo, luego de una audiencia pública realizada el pasado 3 de este mes, el Poder Ejecutivo introdujo una sustancial modificación al plan original, a través de Petropar, a cuyo presidente, Rómulo Alfredo Campos Krauer, se le vio concurrir varias veces al Palacio de López.

De esta forma, Petropar convirtió el proyecto en una futura norma claramente inconstitucional, con la creación del monopolio a su favor, para la importación y comercialización de las naftas del segmento económico, menores a 91 octanos, que son el tipo de gasolina de mayor venta en el mercado, con aproximadamente el 85% de las ventas.

Igualmente, incorporó otro monopolio a favor de la importadora estatal, como la concentración de la mezcla de las naftas con el etanol, que por ley todas las gasolinas deben ser aditivadas con este combustible ecológico, a excepción de las gasolinas de 97 octanos, que son las más caras del mercado y que prácticamente tiene muy poca venta. Así, sorpresivamente, Petropar redactó otro plan de ley con el agregado de más artículos, quedando 10 en total y la denominación se quedó como proyecto de ley “De fomento de consumo de alcohol, alcohol absoluto y alcohol carburante”.

Otro aspecto muy preocupante para el sector productivo alcoholero es que al monopolizar la estatal la mezcla obligatoria de las naftas con etanol, con ello se pondrán en riesgo las millonarias inversiones radicadas para el efecto por los emblemas mayoristas, también las realizadas por las industrias alcoholeras que le proveían de este producto, y así debido a la futura ley habrá peligro de despido de empleados de esas firmas.

Los productores alcoholeros aseguran que al ser Petropar la única habilitada para importar naftas y para mezclarlas con el etanol, fijará el precio que quiera, al ser monopólica, con lo que estará distorsionando totalmente el mercado, tanto de las naftas como del etanol.

En el país existen unas once plantas que procesan alcohol para venderlo a los emblemas para la mezcla correspondiente. Petropar nunca pudo competir con el sector privado desde la desregulación de las naftas en 1994. En los últimos años, los privados invirtieron más de US$ 500 millones.

Copará 75% del mercado

Con base en estadísticas oficiales del año pasado, la participación de Petropar en el segmento de las naftas (todos los tipos) apenas llegaba al 10%; pero con el proyecto de ley inconstitucional que le concederá el monopolio en la importación, venta y mezcla, pretende pasar del 10% al 75% del mercado, incluso se habla del 85%, que es lo manejado hoy por las firmas privadas.

Petropar nunca pudo competir con el sector privado desde la desregulación de las naftas en 1994, por su ineficiencia, corrupción y prebendarismo.