Seam recomienda evitar bañarse en las aguas del lago Ypacaraí

Tras años de sufrir descargas contaminantes, el lago Ypacaraí entró en un proceso cíclico de aparición de cianobacterias, altamente peligrosas. Sin embargo, en las últimas semanas se confirmó que las mismas se proliferaron y hoy existe un nuevo tipo, diferente a las demás y frente a la cual no se cuenta con mecanismos de mitigación de impacto, según informaron ayer los técnicos de la Seam. Mientras se realizan estudios preliminares, recomendaron a la población no utilizar las aguas del lago con fines recreativos.

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Durante una conferencia de prensa que tuvo lugar en la Secretaría el Ambiente, los técnicos de la cartera y algunos intendentes de ciudades afectadas informaron acerca de un plan interinstitucional para controlar y combatir la proliferación de cianobacterias o algas en el lago.

El brote se detectó tras la denuncia de mortandad de peces y la causa principal sería el arrojamiento permanente de residuos cloacales, provenientes de los diferentes municipios, según informó el ministro de la Seam, Heriberto Osnaghi.

El mismo también se refirió a la aparición de un nuevo tipo de cianobacteria denominada “Cylindrospermopsis raciborskii”, frente a la cual no se disponen de mecanismos de mitigación de impacto.

Por de pronto la Seam recomendó a la población no utilizar las aguas del lago con fines recreativos, hasta tanto estén listos los resultados de los estudios que lleva adelante actualmente la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa). Las cianobacterias pueden ser muy tóxicas y apeligrar el sistema nervioso y hepático de los animales, incluidos humanos.

Así también se anunciaron controles sobre los establecimientos industriales ubicados en las cercanías del lago, para verificar que no estén vertiendo líquidos sobre él y que se adecúen a la licencia con que cuentan.

Pese a la anunciada alianza entre municipios, todos coincidieron en que la situación del lago mejorará únicamente si varían las condiciones climáticas que actualmente favorecen la proliferación de bacterias.

“Mutan”

José Luis Casaccia, fiscal del Ambiente y exministro de la Seam, señaló ayer que la presencia de las algas en el lago no es una novedad, sino una situación de la cual se viene advirtiendo desde hace varios años.

En pocas palabras, las algas no son sino la mutación de otras, que ya habían aparecido anteriormente.
Según él, la única salida es dragar el lago para darle mayor profundidad y que sus aguas puedan oxigenarse mejor. “Si no se toman medidas urgentes, en pocos años ya no habrá vida acuática en ese lago, pues las algas serán cada vez más tóxicas y peligrosas”, alertó.

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