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Las 28 viviendas sin terminar son pequeñas y todas exactamente iguales. Se componen de una habitación grande, una sala, una cocina y un baño. Después de que la Secretaría Nacional de la Vivienda y el Hábitat (Senavitat) abandonara su construcción hace dos años, los beneficiarios terminaron algunas de ellas como pudieron, colocándoles techo de zinc, por ejemplo. Aunque, naturalmente, soportan altísimas temperaturas en su interior como consecuencia.
Alberto Cáceres, de profesión zapatero, es uno de los beneficiarios. Él comentó que en su caso el constructor, un tal ingeniero Ughelli, solo levantó las paredes. Entonces él y su familia se instalaron al lado en una precaria edificación de madera y zinc, para evitar que otro ocupe la casa.
Dijo que él y los demás propietarios acordaron con Senavitat una cuota mensual de G. 80.000 por 20 años, que regularmente siguen pagando.
Sin respuesta
Cáceres explicó también que desde que asumió la actual ministra de la Senavitat, Soledad Núñez, han intentado reunirse con ella para conocer la situación de la construcción y si hay visos de que terminará algún día.
“Cada mes nos prometen que van a venir a terminar (las casas) pero seguimos esperando. Lo poco que se construyó se irá abajo”, dijo.
También señaló que a raíz de que el piso nunca se terminó, sus muebles y electrodomésticos están sobre la tierra y en parte del terreno los yuyales sirven como aguantadero de delincuentes.
Sobre este tema en Senavitat dijeron que hoy lunes se pronunciarán sobre el tema, porque debían primeramente individualizar el asentamiento.
Déficit
La ministra Soledad Núñez dijo recientemente que el déficit habitacional en el país asciende a más de 1.100.000, aunque aclaró que estos números están en proceso de revisión para su actualización.
Dijo que el presupuesto para el año venidero para el programa Fonavis asciende a 233.000 millones de guaraníes (US$ 51 millones), pero para satisfacer la demanda actual se necesitan otros 671.000 millones de guaraníes (US$ 146 millones), de modo de totalizar 904.000 millones de guaraníes (US$ 197 millones) solo para este sector.