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ENCARNACIÓN (De nuestra redacción regional). Mientras numerosas familias de Itapúa carecen de un lugar digno para vivir, decenas de viviendas construidas por la Entidad Binacional Yacyretá (EBY) se pierden entre malezas.
Las casas deshabitadas están en los barrios San Pedro, San Isidro y Arroyo Porã, expuestas al deterioro y la rapiña desde hace varios años.
Cada vivienda cuenta con dos habitaciones, un baño y una sala-comedor. Fueron edificadas para relocalizar a familias cuyas casas quedaron anegadas con la subida de la cota del río Paraná.
En horas de la noche todo el complejo está a oscuras, lo que genera preocupación entre los vecinos. Temen que el lugar sirva de “aguantadero” de delincuentes, así como criadero de alimañas.
El presidente de la comisión vecinal Etapa 8 San Isidro, Emigdio Ruiz Díaz, dijo que hay unas treinta casas en estado de abandono, con vidrios rotos y pastizales altos en espacios verdes.
Añadió que en esta situación los predios se convierten en sitios propicios para la ejecución de actos de vandalismo, que de por sí ya son notorios.
Para la pobladora Juana Melgarejo, de la Etapa 6, la cuestión no es menos relevante debido a que existe una elevada demanda habitacional en la zona, y ver estas casas en estado de abandono es un despropósito para las miles de familias que precisan un hogar.
El encargado de prensa de la entidad binacional, Celso Giménez, dijo que el complejo habitacional será ocupado por los futuros relocalizados de la franja de afectación del ferrocarril.
Intentamos conocer más datos sobre la obra en la oficina de Reasentamientos de la EBY, pero ningún funcionario quiso responder a los requerimientos.