Una manzana ubicada en pleno centro de esta antigua población limpeña fue por mucho tiempo motivo de preocupación y hasta de disputa entre vecinos, porque estaba convertida en un tremendo basural. Era un lugar bajo, "una palangana", y hasta parece que inconscientemente los vecinos comenzaron a arrojar los desperdicios en el sitio y se creó un propicio ambiente para criar moscas y otros insectos.
Como era lógico suponer, se tuvo la reacción de algunos sectores y la aprobación de otros. Lo cierto era la necesidad de rellenar el predio, "y antes que entrar en conflicto, buscamos las alternativas de solución", manifestó el ingeniero Eliodoro Marecos, presidente de la comisión vecinal.

Prepararon el proyecto y pidieron a los vecinos que siguieran tirando su basura en el lugar e inclusive los camiones recolectores aprovecharon. "Al mismo tiempo, iniciamos el relleno sanitario, gracias a las máquinas que nos envió en forma gratuita el ingeniero Claudio Gómez", sostuvo Marecos.

Con la efectiva colaboración de los vecinos, fue avanzando el emprendimiento. Recordó el presidente de la comisión que el presupuesto del complejo recreativo orillaba los 800 millones de guaraníes. "Sin embargo, nosotros pudimos terminar con 250 millones, con los aportes de la Gobernación de Central y la Municipalidad de Limpio", manifestó.
Hoy, en el ex vertedero se observa un hermoso espacio verde, que incluye parque infantil, cancha de fútbol iluminada, el tinglado multiuso con amplias graderías y la construcción de la réplica del legendario y pintoresco paraje conocido como "El Peñón", situado en medio del río Paraguay.

El estadio ya albergó este año a centenares de fanáticos del fútbol de salón que siguieron a Piquete Cue en las eliminatorias del Campeonato Nacional de ese deporte.