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Dijo que Brasil y Argentina se encuentran entre los diez más grandes productores de miel a nivel mundial, pero exportan miel tradicional, mientras el mercado internacional exige la ecológica certificada.
Para lograr el objetivo la Cooperación Alemana de Desarrollo (GIZ) cooperará con una propuesta a nivel nacional, dijo Escobar.
Destaco además que el nuevo Programa Nacional de Apicultura, lanzado en setiembre de 2017, integra como nuevo elemento la dinámica productiva de la apicultura migratoria. En este sistema el apicultor sube la colmena en el camión y sigue la ruta de la floración.
También pone énfasis en la polinización porque “nuestro país está entre los diez primeros productores mundiales de alimentos, pero cada vez hay menos polinizadores naturales, silvestres”.
Entonces un compromiso del agricultor es tener una colmena al lado de cada cultivo para que todas las flores de las plantaciones se transformen en frutos y semillas para producir más alimentos, no solamente en cantidad sino también en calidad. Una planta que fue polinizado por la abeja tiene mayor valor nutritivo, explicó el profesional.
Agroquímicos
En cuanto a la reciente prohibición de la Unión Europea (UE) de todos los insecticidas que afectan a las abejas, cuya merma arriesga los alimentos a nivel mundial, Escobar calificó como una medida acertada. Señaló que “nuestro país siempre anda un poco retrasado en la adopción de las medidas, pero si la UE lo está haciendo, creo que va a decantar en corto tiempo para que rija también aquí, ya que va a ayudar mucho a la conservación de las abejas”.
Durante la actividad también se resaltó que el 20 de mayo próximo se recordará a nivel mundial por primera vez el Día de la Abeja.