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NUEVA ITALIA, Dpto. Central (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal). La reliquia viviente de este distrito tiene una envidiable lucidez. Durante el festejo por sus 101 años de edad don Máximo Fernández Ramírez se mostró muy conversador con sus hijos y vecinos e inclusive recordó algunas anécdotas del conflicto entre Paraguay y Bolivia que comenzó en 1932 y terminó en junio de 1935 con la firma del Tratado de la Paz del Chaco, hace 82 años.
Para don Máximo no existen mayores secretos para llegar a la longevidad. Aseguró que la buena o sana alimentación y en las horas establecidas es lo fundamental.
Aseguró que no se priva en cuanto a alimentación, pero que sus platos favoritos son los que se elaboran a base de carne roja y el fideo kesu. También consume arroz y mucha leche.
“Me mantengo muy bien, la verdad no siento nada; por la edad ya no me puedo manejar solo, pero estoy muy sano y, si Dios permite, cumpliré más años”, expresó el benemérito.
Valoró el cariño de sus dos hijos: Juan Francisco (73) y Francisca Fernández (69). Su hija vive con él en su casa del barrio San Blas. Resaltó que también sus nietos y bisnietos le visitan con frecuencia.
El héroe recordó que llegó al Chaco en 1933 y se reunió con sus hermanos Pedro y José Dolores, que también se alistaron para defender nuestro territorio chaqueño de las tropas bolivianas.
Su nieto Fidel Giménez expresó que “gracias a Dios el abuelo está supersano; no tiene ninguna enfermedad y aún come de todo”.
“Él es nuestro principal orgullo y una reliquia viviente de la comunidad. Ojalá que lo tengamos varios años más”, dijo.
Su hija, Francisca Fernández, señaló que para la familia es un orgullo tenerlo con vida al héroe y lo calificó como una bendición de Dios.
Además del cariño de sus dos hijos, don Máximo goza del amor de sus cuatro nietos y 14 bisnietos, que le miman y cuidan en forma permanente.
La Municipalidad de Nueva Italia, administrada por el intendente Osvaldo Krause (PLRA), le hizo un reconocimiento especial y lo declaró “ciudadano ilustre” del distrito.