Querella a sacerdote fue por permitir publicación de inquietudes ciudadanas

El padre José María Velasco fue querellado por permitir que el semanario “Virgen de la Candelaria” se haga eco de problemas, necesidades e inquietudes de la ciudadanía contra las autoridades municipales, deportivas, cooperativistas y empresarios. Asimismo, de serias sospechas de confabulaciones en supuestos hechos de corrupción. Los querellantes son el senador Derlis Osorio, el intendente de Capiatá, Antonio Galeano, y dirigentes deportivos.

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CAPIATÁ (Antonia Delvalle Castillo, corresponsal). Los abogados Miguel Adrián García y Liz Marissa Samaniego, patrocinantes de la querella entablada por difamación, calumnia e injuria al sacerdote José María Velasco, en el escrito de 76 páginas van detallando las publicaciones que agraviaron a sus clientes: el senador nacional Derlis Osorio y el actual intendente de Capiatá, Antonio Galeano.

Asimismo al concejal Néstor Castellano, Óscar Américo Barreto Brizuela, presidente del Sportivo Capiatá y de la Liga Capiateña; y Carlos César Ramírez Valdez, tesorero de la Cooperativa Capiatá.

La querella admitida por el Tribunal de Sentencia presidido por el juez Rolando Duarte Martínez y Javier Sapena Bibolini (suplente) señala en la página 28 que el intendente Galeano se sintió herido en su honor y reputación porque se publicó la queja de vecinos del barrio San Miguel, Quinta Compañía.

Los pobladores denunciaron el bloqueo de la calle 4 de Octubre “por parte de una familia acostumbrada a la prepotencia de la época de la dictadura”.

“Ante este hecho se conformó una comisión para recurrir a las autoridades correspondientes, la Municipalidad, a fin de que proceda a despejar la calle, pero hasta ahora no hemos conseguido respuesta alguna, teniendo en cuenta que hace cuatro meses que hemos venido sufriendo este atropello a nuestros derechos”, dice la nota que remata acotando que el jefe comunal no cumple su función para el que fue electo.

Otro hecho “agraviante” a la reputación del jefe comunal se refiere a una carta publicada en el semanario por el padre Velasco en la que le pide colaborar para cuidar el templo (ver facsímil).

En la página 30 la querella señala una publicación sobre “componendas” para la aprobación de la ejecución presupuestaria de los años 2011 y 2012, para evitar investigaciones en la utilización de royalties para el pago de salarios, así como de dudosos anticipos a empresas adjudicatarias de obras. También molestó a los querellantes la columna de apostillas “Pepito, el preguntón”. En la publicación del 21 de marzo de 2013 se hace mención a una confabulación para pagar con dinero de la Junta de Saneamiento una deuda por IVA al Ministerio de Hacienda, que fue descontado a los usuarios de la institución (2006-2009) pero no rendido, por lo que fueron procesados por evasión de impuestos los querellantes Carlos Ramírez y el concejal Néstor Castellano, aunque este desmintió su vinculación en esta causa.

Libertad de prensa

El senador Derlis Osorio señaló que la querella no es contra la libertad de prensa ni contra la Iglesia, sino contra el sacerdote José María Velasco. Dijo que hace tiempo, a través del semanario, viene soportando que mancillen sus nombres (de los querellantes) y que tiene denuncias graves contra el religioso que presentará en su momento. Lo acusó de obligar a los alumnos del colegio parroquial a participar de las marchas contra la corrupción.

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