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El cargamento no contaba con documentación y el chofer del camión no portaba su cédula de identidad en el momento del operativo.
El parlamentario amenazó al comisario con que conseguiría su traslado de esta zona y ese mismo día el uniformado recibió la orden del propio comandante Luis Rojas de que se presente a la comandancia. Se cumplió la amenaza.
Luego, la fiscala de Fuerte Olimpo Teresilde Fernández liberó el cargamento, supuestamente después de que el chofer haya presentado su cédula de identidad.
Finalmente, el comisario Caballero fue reacomodado como jefe de Seguridad Ciudadana en la Jefatura Policial de Presidente Hayes.
Relato
Según el comisario Caballero, minutos después de ordenar la detención del camión con los animales vacunos, el chofer recibió una llamada telefónica del diputado Adorno quien le recriminó por su actuación. Le exigió que inmediatamente liberara la carga y la persona detenida, y le aseguró que se encargaría de su destitución.
En esa oportunidad, Adorno acusó a Caballero de ser un asaltante y de perseguir a personas humildes a quienes supuestamente exigía coimas.
Caballero estuvo varias semanas sin cargo y a disposición de la Comandancia de la Policía Nacional. Incluso existía la posibilidad de su pase a retiro, pero finalmente fue reubicado en la jefatura de Presidente Hayes.
En una entrevista telefónica, el comisario Caballero manifestó que prefiere evitar realizar comentarios relacionados al procedimiento del 12 de octubre y el desenlace que tuvo, “atendiendo su situación de subalterno”. Se limitó a decir que todos saben lo que sucede en el Alto Paraguay, donde muchos poderosos están involucrados en hechos de corrupción.