Cumbre sobre drogas no analiza las demandas de despenalizar consumo

LIMA (AFP). La conferencia internacional sobre drogas efectuada entre el lunes y ayer en Perú concluyó con la firma de la Declaración de Lima en la que las delegaciones de 61 países asistentes se comprometieron a incrementar sus esfuerzos contra el tráfico de drogas.

https://arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/D7EWPZ6TGJEEHJSQYOSZXQ2DNY.jpg

Cargando...

El documento no menciona las demandas de varios gobiernos de América Latina que piden reformar la estrategia contra las drogas e incluso legalizarlas, a lo cual Estados Unidos se opone de plano.

El tema “sin duda estuvo presente en los debates”, dijo escuetamente una fuente diplomática que requirió el anonimato.

Por Estados Unidos asistieron al encuentro el director de la Oficina de Control Antinarcóticos, Gil Kerlikowske, y el encargado antidrogas del Departamento de Estado, William Brownfield.

“Siempre revisamos nuestras políticas y precisamente en esta conferencia los delegados están expresando y aportando sus ideas para poder mejorar”, dijo Kerlikowske, al ser interrogado sobre si su país hacía una autocrítica por la política que impulsa en materia de drogas.

La Declaración final suscrita, tras dos días de deliberaciones, señala en una de sus partes: “Reconocemos la necesidad de intensificar los esfuerzos sobre cooperación internacional en favor de una estrategia integral y equilibrada para contrarrestar el Problema Mundial de las Drogas”.

Las delegaciones insistieron en que el problema de las drogas “debe abordarse en un marco multilateral, regional y bilateral, con medidas concretas, amplias y eficaces para reducir tanto la demanda como la oferta de drogas ilícitas, con base en el principio de responsabilidad común y compartida”.

En los debates, los participantes reconocieron “cierto progreso” a nivel local, regional e internacional, aunque expresaron aún su preocupación por “las tendencias mundiales negativas en materia del cultivo, producción, fabricación, tráfico y uso indebido de drogas”.

Las delegaciones coincidieron, además, en la “urgente necesidad de responder a los graves desafíos planteados por los crecientes vínculos entre el narcotráfico, la corrupción y otras formas de delincuencia organizada transnacional, como trata de personas, tráfico de armas de fuego, los delitos cibernéticos y, en algunos casos, el terrorismo y el blanqueo de dinero”.

Las 61 delegaciones acordaron el intercambio de información y de las mejores prácticas en programas, reconociendo que se debe fortalecer la cooperación necesaria en esa materia.

Enlance copiado
Content ...
Cargando ...