Farsa electoral chavista para reelegir a Maduro

Bajo dictadura chavista y en medio de una de las peores crisis política y socioeconómica, en Venezuela se realizarán mañana elecciones, pero con final conocido: la reelección de Nicolás Maduro. Varios gobiernos impusieron sanciones y desconocerán estos comicios, aduciendo que no serán libres ni justos.

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CARACAS (AFP). El régimen chavista orquestó esta farsa electoral para seguir empotrado en el poder al que llegó hace casi dos décadas con el fallecido Hugo Chávez. Aquí una radiografía del país: 

Lo político: Con la elección de Chávez, en 1998, Venezuela pasó a tener un sistema socialista hasta convertirse en lo que es hoy: una dictadura. Rompiendo una hegemonía de 16 años de chavismo, la oposición arrasó en las parlamentarias de 2015, desatándose un choque de poderes en medio del cual fue bloqueada en su objetivo de sacar a Maduro del poder. 

Pero el jefe de Estado, siguiendo el esquema de Chávez, para asegurar su permanencia en la presidencia y mantener la lealtad de las FF.AA. les concedió a los militares la administración de sectores estratégicos de la economía como petróleo y alimentos, además de dotarlas de armamento ruso y chino.

De 32 ministros del gabinete, 14 son militares. La participación militar en el gobierno aumentó de 25% en 2014 a 43,75% en 2018. 

Entre denuncias de ruptura del orden democrático, Venezuela vivió cuatro meses de violentas protestas opositoras en 2017, que dejaron unos 125 muertos y fueron desactivadas con la “elección” de una Asamblea Constituyente oficialista, con poder absoluto pero desconocida por la comunidad internacional. Esta adelantó las presidenciales y aumentó el aislamiento internacional 

Lo económico: Depende de la renta petrolera, que aporta 96% de los ingresos. Es el país con las mayores reservas de crudo del mundo.

El desplome de los precios en 2014, la corrupción y las ineficiencias generaron escasez de bienes básicos, y una caída del PIB e hiperinflación que el FMI proyecta en 13.864%, para 2018.

Desde 2003 el Gobierno monopoliza las divisas y controla precios, avivando un voraz mercado negro del dólar y de productos, lo que Maduro denuncia como “guerra económica”. 

El país y su petrolera PDVSA cayeron en default parcial por pagos atrasados.

Lo social: La pobreza escaló a 87% en 2017, mientras que la Federación Farmacéutica advierte de una escasez de medicinas comunes de 85% y de 95% para enfermedades crónicas como cáncer o VIH.

Investigaciones de universidades locales estiman que desde 1999 emigraron unos cuatro millones de venezolanos, una buena parte desde 2014. La inseguridad es otro de gran problema. Tiene una tasa de 89 homicidios por cada 100.000 habitantes en 2017, 14 veces la media mundial, según el Observatorio Venezolano de Violencia.

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