Cargando...
Por ejemplo, por una carga de marihuana que salía de los montes de la zona baja de Canindeyú, en la comisaría de Villa Ygatimí y también en la oficina de Investigaciones de la misma ciudad los narcos dejaban G. 1.500.000.
En el puesto policial del kilómetro 21 de Curuguaty, ya saliendo a la Ruta 10, se pagaba G. 1.000.000 de coima, en tanto que los agentes de Yvy Pytã y Brítez Cue recibían G. 5.000.000.
Los policías del Cruce Yvyrarovana y del centro urbano de Yvyrarovana también recibían supuestamente G. 5.000.000.
En Yhovy, el la tarifa era de G. 4.000.000, en Cruce Guaraní era de G. 4.000.000 y en Cruce Carolina era de G. 5.000.000.
Ya llegando a la frontera, siempre en el tramo de la Ruta 10, los narcos pagaban G. 4.000.000 en la comisaría de La Paloma y nada menos que G. 11.000.000 en el puesto de control del Kilómetro 7.
En la oficina de la Senad, que funciona frente al Hospital Regional de Salto del Guairá, los marihuaneros dejaban religiosamente G. 5.000.000 por cada carga y pagaban una tarifa fija de 2.500 dólares cada mes.
Los militares de la Caballería, cuyo cuartel funciona en la entrada a Salto del Guairá, supuestamente cobraban 2.000 dólares mensuales para hacer la vista gorda y los pagos se hacían el 15 de cada mes.
En la ciudad de Salto del Guairá, donde funcionan todas las principales unidades policiales, supuestamente se entregaban 1.000 dólares para el director de Policía el 20 de cada mes, así como G. 2.5000.000 cada uno para el jefe de Orden (ahora Prevención y Seguridad), para la comisaría 1° y para el Grupo Especial de Operaciones (GEO).
La nómina de beneficiados alcanzaba a Antinarcóticos, con pagos por carga y mensuales, que eran de entre G. 2.000.000, G. 5.000.000 y G. 18.000.000.
Algunas oficinas tenían regímenes de cobros más específicos, como Delitos Económicos, con G. 1.000.000 semanal; Inteligencia, con 2.500 dólares cada fin de mes; Interpol, con 2.000 dólares cada mes.
Investigaciones cobraba entre G. 5.000.000 y G. 7.000.000.
Homicidios recibía G. 2.000.000 y Automotores cobraba G. 4.000.000 por ignorar el tráfico de marihuana, siempre según la agenda hallada.
Los más “chicos”
Aunque había montos importantes de coimas, también figuran algunas cifras irrisorias, como las que recibían supuestamente los funcionarios de Detave, con 150 dólares semanales, y los de Aduana y Puertos, con 100 dólares cada ocho días. Las oficinas de estas instituciones funcionan casi frente al depósito allanado, donde se encontraron las 16 toneladas de marihuana.