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“Él se encontraba en el local de ‘Tigo’, esperando un giro que le enviaba su padre probablemente. Estaba con lentes de sol y su actitud sospechosa nos llamó la atención, cuando pasamos frente al local, a bordo de la patrullera C-75”, explicó el jefe de la comisaría 7ª Central, comisario principal Carlos Domínguez.
“Previamente pedí permiso a los empleados de Tigo y tras acercarnos a él le pedí que me acompañara directamente a la patrullera. Primeramente negó su documentación, pero cuando le llevamos a la comisaría nos reveló que era Julio Van Humbeeck”, afirmó el jefe policial.
Van Humbeeck está acusado de estafar a más de 30 jovencitas, además de apropiación, abuso sexual y pornografía infantil.
Se hacía pasar por promotor de una agencia de modelos para captar y estafar a mujeres, según los antecedentes.