Protagonizaron una histórica persecución

Sin embargo, menos de un año después, el 7 de agosto de 2013, “Cabezón” y “Cabecita” lideraron un millonario asalto frente al Ministerio del Interior e inmediatamente después protagonizaron una histórica persecución a tiros por casi toda la ciudad de Asunción y que concluyó sobre la avenida Bruno Guggiari de Lambaré.

En dicho punto se desató una última balacera, en la que los policías eliminaron a uno de los miembros de la banda, el chacariteño Pedro Rodolfo Toledo González, así como hirieron de refilón a Diego “Cabezón” y dejaron gravemente herido con un tiro en la cabeza a su hermano menor Fabio “Cabecita”. Una doctora que quedó atrapada con su vehículo en medio del fuego cruzado también había resultado baleada.

El comisario principal Rubén Paredes reveló ayer que Fabio “Cabecita” también ya venía siendo buscado por el robo de 120.000 pesos argentinos (equivalentes a unos G. 36 millones) ocurrido el 8 de abril pasado en Mariano Roque Alonso, en perjuicio de un turista argentino. Las huellas digitales de Fabio quedaron por el vehículo de la víctima. Igualmente soportaba otra orden de captura dictada por el fiscal Yoan Paul López, que data ya de diciembre del año 2015, siempre por robo agravado.

Fabio Manuel Ruiz Díaz Molinas, tras ser baleado en la cabeza por la Policía en el año 2013, pasó mucho tiempo en terapia intensiva hasta que se recuperó, fue encerrado por otro periodo breve y después salió sorpresivamente en libertad, gracias a un arresto domiciliario otorgado por la jueza María Gricelda Caballero, según el boletín dado a conocer por la Policía.

Aparentemente, “Cabecita” hizo creer a la magistrada que quedó postrado en cama y por eso le concedió la medida, que el delincuente estaba violando de nuevo.