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Plazas abandonadas y en mal estado se constituyen en guaridas de adictos en lugar de ser sedes de esparcimiento familiar.
La denominación de “Ciudad Verde” aún está muy lejos de materializarse en Asunción. La desidia comunal y la falta de colaboración de la ciudadanía hacen que la “Madre de ciudades” siga con los mismos vicios de siempre.
Las autoridades de la Comuna capitalina tienen entre sus objetivos la recuperación de espacios verdes en los barrios. La plaza lineal Martínez Ramella del barrio Mburicao, que se encuentra en estado total de abandono, es un vivo ejemplo de que la meta está muy lejos de ser cumplida.
Cada vez que llueve, Asunción sufre el embate de los raudales. Uno de los motivos principales de este problema es la escasa cobertura de la red de desagüe pluvial con que cuenta la ciudad.
En la esquina de Ygatimí y Nuestra Señora de la Asunción, el desagüe que debería desagotar el agua de la calle es una trampa para peatones y conductores. Obreros de la Municipalidad de Asunción parcharon el boquete, en lugar de repararlo, dejando un peligroso agujero.
Desde hace dos meses, comerciantes y vecinos ubicados en la esquina de Juan León Mallorquín y Trejo y Sanabria del barrio Carlos Antonio López reclaman la reparación de la carpeta asfáltica que presenta un bache de gran porte, constantemente cubierto de agua. Relataron que en la esquina se producen con frecuencia roces entre vehículos ya que, en su intento por esquivar el agujero, cruzan al otro carril, sin poder evitar la colisión.
En Asunción resulta muy dificultoso encontrar lomadas correctamente señalizadas. En Guillermo Arias y Patricios, del barrio Rodríguez de Francia, el constante pasar de buses de transporte público deterioró la capa asfáltica, generando peligrosas ondulaciones que deformaron la lomada. Circular por la zona es peligroso, sobre todo si el conductor posee un vehículo bajo.
Si bien desde un tiempo la Municipalidad ha construido varias rampas para personas con discapacidad –muchas de ellas muy angostas–, algunas ya están visiblemente deterioradas, convirtiéndolas en lugares totalmente inaccesibles.