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Mientras una pareja representaba el ritual de ahuyentar a Karai Octubre en la Plaza Uruguaya, cientos de personas saborearon variedades de jopara para llamar a la abundancia siguiendo una antigua tradición popular.
Las cacerolas de cuatro variedades de jopara que eran para 500 personas en la comilona de la víspera, realizada en la Plaza Uruguaya, se agotaron en poco tiempo. Clemente Cáceres, coordinador del evento organizado por la Dirección de Cultura y Turismo de la Municipalidad de Asunción, explicó que se rescataron variedades más nuevas como el jopara kesu que no alcanza el siglo de existencia. “Las más antiguas recetas son las variantes con carne y cerdo; y el joparaite, que aún en algunos hogares de Misiones, Paraguarí y Ñeembucú se consume”, explica Cáceres y añade que el joparaite o jopara-jopara es el que lleva poroto rojo, locro, arroz, fideo, carnes de pollo, vaca y cerdo, verduras y especias. “Yo preparo con poroto, locro, verduras, carne y queso porque así le gusta a mis clientes”, dice Norma Molinas (45), del comedor San Miguel del Mercado 4, mientras sirve un plato bien cargado para un cliente que cada año va al comedor a saborear el jopara. Dijo que la receta aprendió de su madre, Margarita Molinas.
Integrantes de la Federación Campesina, con productos de sus cosechas sirvieron gratuitamente 150 platos de jopara en la Plaza Juan E. O’Leary que se acabó en menos de dos horas.
El 1 de octubre se revive en el Paraguay una tradición anual, muy arraigada y conocida. En efecto, con el inicio de este décimo mes también saldrá del monte un mítico personaje llamado Karai Octubre. Hombre descalzo y de rasgos duros, ataviado a la usanza del campesino paraguayo; con un sombrero de paja y portando un desafiante arreador (látigo) de ysypo para ahuyentar la mala fortuna.