/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/X6X6WPRJT5AHNGEXL75FUWFYUU.jpg)
Cargando...
Se estima que habrá más lluvias en febrero y marzo, y que habrá un descenso del nivel del río antes de volver a aumentar.
Óscar Hugo Rodríguez, gerente de Climatología e Hidrología de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), señaló que entre febrero y marzo va a llover un 95% más del promedio de lluvia normal que está en el rango de los 450 a 500 ml.
“Con los pronósticos de lluvias para el inicio del otoño, lo más probable es que los ríos Paraguay y Paraná vuelvan a subir. Las alturas máximas dependerán de los volúmenes de lluvias de exceso y donde ocurran. Los pronósticos no indican que se repitan en los departamentos de San Pedro y Concepción. Con este escenario, si bien habrá un repunte de los niveles, que podría llegar entre los 8 y 9 metros en Asunción, es muy poco probable que alcance las magnitudes del año 1983 en esta ciudad. Para Alberdi y Pilar, la situación puede ser considerablemente diferente”, refirió.
El ingeniero José Luis Ávila, del MOPC, agregó que se prevé un descenso del nivel río, el cual llegará a aproximadamente un metro, lo cual, sin embargo, será el punto de partida para un nuevo repunte. Además indicó que las secuelas del fenómeno de El Niño podría afectar todo el año.
“Actualmente el río está cuatro metros arriba del promedio normal y en un momento el río descenderá, lo cual podría provocar falsas expectativas, ya que seguidamente aumentará de nivel nuevamente”, dijo. Además indicó que las secuelas del El Niño podrían afectar todo el año.
“Modelos dinámicos y estadísticos predicen el inicio del debilitamiento del fenómeno de El Niño, hacia el final del otoño (mayo) con una probabilidad de un 85% positivo. Aún así el fenómeno se mantendrá presente hasta mediados del año, para luego empezar a decaer. Esta condición generará lluvias por encima de lo normal en el centro del país, que afectarán a todas las ciudades ribereñas desde Concepción para abajo. Además, las secuelas afectarán todo el año si no se toman los recaudos necesarios”, añadió.
El ministro de la SEN, Joaquín Daniel Roa, indicó que estos datos consolidan el exhorto del Gobierno Nacional de que las familias permanezcan en los albergues, en donde están en estos momentos.
“Vamos a estar planificando con todos los ministros, cada quien en su cartera, lo que sea necesario para mitigar los efectos del fenómeno del Niño”, dijo.
La ministra de Educación, Marta Lafuente, señaló, por su parte, que esta situación podrá afectar la distribución de los útiles escolares por la falta de accesibilidad de los caminos y que con la altura actual de las aguas, unas 75 escuelas están afectadas.
“La conclusión es que nosotros vamos a atender a estas escuelas por el resto del año con soluciones no transitorias, sino más permanentes de tal manera que lo que hemos pedido a esta mesa técnica de la SEN para completar nuestra planificación es que nos definan las implicancias por distrito, de tal manera que las soluciones que busquemos no se pierdan con la inundación de los nuevos espacios elegidos”, dijo.
El ministro de Salud, Antonio Barrios, agregó que seguirán trabajando con los afectados por las inundaciones por lo que resta del año en lo que refiere a salud mental y todos los problemas que significan el convivir todos juntos; como la violencia sexual, la violencia doméstica, entre otros. Además, indicó que seguirán trabajando en la concienciación para erradicar los criaderos de mosquitos transmisores de los virus del dengue, zika y chikunguña.
Sin tiempo para Alberdi
El ministro de Obras Públicas, Ramón Jiménez Gaona, señaló que no les alcanza el tiempo para fortalecer el muro de contención de Alberdi, ya que la bajante del río prevista no va a ser suficiente para permitirles intervenir.
“Estamos evaluando otras medidas por dentro del muro para intentar fortalecer la estructura que va a volver a estar desafiada en los meses de mayo, junio y julio”, dijo.
Jiménez anunció la contratación de 200 motoniveladoras del sector privado para acelerar la recuperación de los caminos vecinales.