La Primera República de América del Sur

Con la paciencia de una docente y, dada su experiencia como directora de la Casa de la Independencia durante los festejos del Bicentenario, Carmen Sosa Ruiz narra en forma pedagógica el significado de los acontecimientos que llevaron a la consolidación del Paraguay como un país soberano.

Después de los eventos del 14 y 15 de mayo de 1811 –explica–, la Provincia del Paraguay seguía siendo técnicamente una provincia española. Se había conformado un breve gobierno provisorio, el Triunvirato, con el gobernador Bernardo de Velasco (que había aceptado la capitulación) y dos diputados, el Dr. José Gaspar Rodríguez de Francia y el Cap. Juan Valeriano de Zevallos, español, pero adherido a la causa patriota. El Triunvirato inició sus gestiones el 16 de mayo de 1811. El 9 de junio, el Cuartel General destituyó a Velazco por complicidad con los portugueses. La medida se extendió a los miembros del Cabildo, en su mayoría, españoles.

El 17 de junio se reunió el Primer Congreso Nacional, que entre otros temas, elige un nuevo gobierno: la Junta Superior Gubernativa integrada por: presidente: TCnel. Fulgencio Yegros; vocales, Dr. José Gaspar de Francia, Cap. Pedro Juan Cavallero, Presb. Dr. Francisco Xavier Bogarín, y don Fernando de la Mora como secretario. Durante los dos años y cuatro meses, con ausencias y retornos del Dr. Francia, la Junta ejecutó gestiones esenciales:

La Nota del 20 de julio de 1811 a la Junta de Buenos Aires presidida por Cornelio Saavedra, que está considerada como la primera nota diplomática del Paraguay. En ella se lanza por primera vez en esta parte del continente la idea de la confederación de todas las provincias americanas, especialmente las que integraron el Virreinato del Río de la Plata. “Pero todo en términos de absoluta igualdad y con plena autonomía de cada parte y se le atribuye su autoría al Dr. Francia”. Algunas citas dicen: “El Paraguay con su revolución no ha querido cambiar unas cadenas por otras ni mudar de amo (...) La Provincia del Paraguay Exmo. Sr. reconoce sus Derechos, no pretende perjudicar aún levemente los de ningún otro Pueblo y tampoco se niega a todo lo que es regular y justo...”. Esto en alusión a no cambiar a España por Buenos Aires.

El Bando del 6 de Enero de 1812, uno de los documentos más trascendentales en la historia de la cultura paraguaya. En uno de sus puntos ordena la adquisición de libros y materiales didácticos de Buenos Aires para la creación de una biblioteca pública. La educación primaria obligatoria, aunque solo para varones. La libre navegación de los ríos Paraguay y Paraná, para transporte de cargas, adelantándose así el Paraguay a otros países en este tema.

El Tratado del 12 de Octubre de 1811, en que el Paraguay quedaba libre e independiente, pero se comprometía a auxiliar a Buenos Aires en caso de peligro extremo. Luego de la firma de este Tratado, la idea federativa, pensada por las circunstancias coyunturales, fue totalmente abandonada y nunca más defendida por el Paraguay.

La Junta Superior Gubernativa gobernó hasta el 30 de setiembre de 1813, fecha en que se reunió el 2º Congreso Nacional, que establece la República.

Segundo Congreso Nacional

Este Congreso sesionó del 30 de setiembre al 12 de octubre de 1813 con la presencia de mil diputados bajo presidencia de Pedro Juan Cavallero. En su convocatoria se fijó un sistema de “sufragio universal y proporcional”, más democrático que el conocido.

En primer lugar, adoptó para el Paraguay el nombre de República, en vez de Provincia, naciendo así nuestro país como la primera República de América del Sur, y es lo que celebramos ahora. Y siguiendo el modelo de la antigua República romana, el gobierno estaría a cargo de dos Cónsules: Francia y Fulgencio Yegros.

Ambos gobernarían conjuntamente, por turnos de cuatro meses, correspondiéndole al Dr. Francia el primero y el tercer períodos. Así se constituye el Primer Consulado, que duraría un año.

El Tercer Congreso Nacional, reunido el 3 de octubre de 1814, adopta la forma unipersonal de gobierno para el siguiente periodo de cinco años, con el Título de Dictador Supremo de la República, y resulta electo el Dr. Francia.

Aún no se habían cumplido los dos años del gobierno francista, cuando el Dictador Supremo convocó el Cuarto Congreso Nacional, el 30 de mayo de 1816. Integrado en su gran mayoría por delegados campesinos adictos a Francia, eligió a este para el mando absoluto, con una nueva investidura: Dictador Perpetuo.

A la muerte del Dr. Francia se formaron varios gobiernos de breve duración, hasta que el Quinto Congreso Nacional estableció el segundo Consulado, esta vez, por tres años, con Carlos Antonio López y Mariano Roque Alonso.

El Congreso de 1842

Siendo cónsules de la República del Paraguay Carlos Antonio López y Mariano Roque Alonso, al promediar el año 1842 se conoció una situación insospechada: no existía una evidencia documental de la proclamación solemne de la Independencia Nacional, ni juramento alguno.

Se convoca un Congreso Extraordinario el 25 de noviembre de 1842, bajo la presidencia del cónsul López. Los cuatrocientos diputados de la Asamblea, ese mismo día, firmaron el Acta Solemne de la Independencia del Paraguay. “La República del Paraguay es para siempre de hecho y de derecho una nación libre e independiente de todo poder extraño”... “nuestra emancipación e independencia es un hecho solemne e incontestable en el espacio de más de treinta años; que durante este largo tiempo y desde que la República del Paraguay se segregó con sus esfuerzos de la metrópoli española para siempre, también y del mismo modo se separó de hecho de todo poder extranjero, queriendo desde entonces con voto uniforme pertenecer a sí misma....”.

El gobierno consular comunicó la solemne declaración a los países vecinos, en especial, a la Confederación Argentina. En el mismo acto se sancionó la Ley del Pabellón Nacional, adoptándose la bandera tricolor, los escudos y el sello nacional, y se fijó el día 25 de noviembre como fiesta solemne en toda la República del Paraguay en conmemoración del Día de la Jura Oficial de la Independencia Nacional.

Monumento

La Casa de la Independencia, como hoy la conocemos, fue edificada en 1772 y pertenecía a los hermanos Pedro Pablo y Sebastián Antonio Martínez Sáenz, que la heredaron de sus padres. De ahí salieron los próceres la noche del 14 de mayo de 1811 para iniciar la gesta emancipadora y allí la planificaron.

Adquirida por el Gobierno en 1943 y declarada Monumento Histórico Nacional en 1961. Está decorada como una típica casa colonial con paredes de adobe y pisos de ladrillos. Fue inaugurado como Museo Histórico el 15 de mayo de 1965, dependiendo de la Secretaría Nacional de Cultura.

La autenticidad histórica del uso atribuido al antiguo Callejón es una sentencia judicial de don Carlos Antonio López, quien siendo cónsul de la República en agosto de 1843, declaró reservada de ventas “las cuatro varas del callejón público que tiene interés para la comunidad de los sentimientos patrióticos”. Don Carlos tenía 19 años en 1811 y fue testigo calificado. Como primer presidente constitucional, por el Decreto del 1º de abril de 1849 puso nombres, por primera vez a las calles: A la arteria sustitutiva del antiguo callejón, puso por nombre “14 de Mayo” y a la crucera de ella por la esquina de la Casa, denominó “Calle del Sol”, cuya continuación hacia el este se llamó calle “De la Libertad”.

En febrero de 2003, el mecenas Nicolás Darío Latourrette Bo, por iniciativa y medios propios, restaura el acervo museográfico y el edificio.

Cuando construyó su casa en 1772, Don Antonio Martínez Saénz jamás se pensó que se constituiría en un destino turístico cultural masivo. Latourrette Bo en el 2003 firma con el Estado paraguayo un acuerdo de protección y patrocinio, y luego es nombrado protector vitalicio de la Casa de la Independencia: “El 14 de setiembre recordamos 10 años de aquella restauración, crucial para la gestión sostenible de este monumento patrio”.

El Segundo Congreso Nacional se reunió en el Templo de los Mercedarios (o de la Merced), donde hoy día se encuentra localizado el Hotel Guaraní. Realizó sus sesiones oficialmente del 29 de setiembre hasta el 12 de octubre de 1813.

Asistieron 1.000 diputados, bajo la presidencia de Pedro Juan Cavallero. La República del Paraguay nació como la primera de América del Sur, cuando en los demás países se insistía en la fórmula fernandina o se buscaban otros monarcas.

Con la declaración de independencia del Congreso Extraordinario de 1842, se cerró el círculo y se concretó todo el proceso de emancipación de nuestro país iniciado en 1811, pues no terminó aún con el Segundo Congreso de 1813.