Obreros de la construcción trabajan bajo riesgo

En Paraguay se nota en forma clara la carencia en las tareas de la construcción la utilización de equipos especiales y de las medidas preventivas en general para precautelar la salud y la seguridad del trabajador, afirmó el asesor externo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Arq. Américo Médici.

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El experto del organismo internacional estuvo en nuestro país donde dictó una conferencia sobre seguridad y salud en el campo de la construcción.

La venida de Médici fue facilitada por un acuerdo firmado entre la OIT y el Programa de Eficiencia y Competitividad de la Industria de la Construcción (PECC).

El evento contó con el apoyo de la Cámara Paraguaya de la Industria de la Construcción (CAPACO) y el aporte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

"La OIT me encargó la realización del curso en seguridad y salud cuyo contenido se centró en capacitar a formadores de instructores. El interés radica no solo en difundir el conocimiento y afianzar un tema tan importante como la seguridad e higiene, sino que también dejar en Paraguay a nivel profesional gente formada a los efectos de que puedan ser multiplicadores del tema y con los conocimientos adquiridos estén preparados para impartir luego clases a capataces, obreros, o a personas de gerenciamiento del sector de la construcción en el Paraguay", señaló nuestro entrevistado.

Consultado sobre la utilización de los sistemas de seguridad en la construcción en nuestro país, señaló que en Paraguay se nota en forma muy clara la carencia de la utilización de equipos y de las medidas preventivas en general para la salud y la seguridad en la construcción. "No obstante, es razonable la postura de los obreros, que no es solo del trabajador, sino que van implícitas tres ejes importantes, que son la empresa, los trabajadores y el Estado, a quien le cabe una gran responsabilidad, porque en la medida en que no se realice un control estricto de las medidas que en el país están escritas y formuladas, no se aplican, y ahí radica el problema. No se aplican fundamentalmente porque no hay claridad sobre las normas de seguridad, no hay una concientizacion colectiva del tema seguridad; por tanto, no existe la cultura de la seguridad en la construcción", explicó el asesor de la OIT.

Añadió que las empresas constructoras invierten muy poco en materia de seguridad. A criterio suyo, cada guaraní gastado se multiplica por cuatro a favor de la misma, por lo que "considero que ninguna empresa no debería escatimar en el tema de la seguridad. El trabajador, además, es proclive a no utilizar los elementos de seguridad por costumbre, por cultura y por falta de conciencia, porque si sale más cara o más barata está en juego la vida del trabajador. Me resulta inentendible que el obrero no haya tomado conciencia aún de que trabaja en total estado de riesgo", concluyó Médici.

En nuestro país, según datos del Ministerio del Trabajo, numerosos obreros ya perdieron la vida al caerse de altos edificios por falta de seguridad. Este es un tema delicado que aún persiste en nuestro medio.
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