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La nutricionista infantil Dra. Susana Sánchez afirma que la merienda escolar es importante porque mantiene los niveles de glucosa en sangre, lo cual influye en la capacidad de atención en aula, así como también permite regular el apetito, ya que el niño no llega con exceso de hambre a la siguiente comida, lo que también disminuye el riesgo de comer en exceso. Así también aconseja que, en lo posible, los niños consuman alimentos fáciles de digerir y no muy calóricos, como por ejemplo: frutas, maní o yogur descremado.
Agrega que lo que se consume en el recreo no reemplaza al desayuno ni la merienda de la tarde.
En la página web del Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAN) que es www.inan.gov.py, en la pestaña “Materiales didácticos”, gratuitamente se puede descargar el díptico sobre “Recreo saludable”. En este material se pueden encontrar varias opciones de lo que el niño debe consumir.
En tanto que en lo posible, la profesional resalta que se deben evitar alimentos envasados con mucha sal, como papas fritas, chicitos de queso, galletitas, entre otras, o con mucha grasa, como frituras, lácteos enteros, etc., y azúcares, como productos de confitería o golosinas.
Sánchez recomienda respetar los horarios de alimentación y realizar las cinco comidas al día, beber abundante cantidad de agua potable, consumir ensaladas frescas dos veces al día y comer tres frutas por día. Además sugiere optar por lácteos bajos en grasa.