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El campus de la UNA tiene el paisaje marcado por los rastros de las tres semanas de manifestación estudiantil, con banderolas, carteles, carpas para dormir, vestigios de ollas populares, tanto frente al Rectorado como en varias otras facultades. Esos sitios amanecieron ayer como abandonados, pero la vigilia estudiantil sigue, según sus dirigentes.
Los accesos principales al campus, que estaban clausurados con diversos materiales, fueron ayer liberados, permitiendo el fluido tránsito.
En el Rectorado volvieron a atender al público, aunque los trámites que requieran de visados administrativos y académicos tendrán un atraso hasta la total normalidad del funcionamiento de las oficinas.
Facultades en conflicto
Las 12 facultades pasaron por momentos críticos durante las últimas tres semanas, con la renuncia de decanos, vicedecanos, miembros de consejos directivos y directores. La mayoría de ellas retornó a una aparente calma, pero sujetas a investigaciones de auditoría interna así como del Ministerio Público (varios fiscales investigan documentaciones).
De las 12, tres soportan aún el “fuego” iniciado por los alumnos. Piden la destitución de las autoridades de Filosofía, Agronomía e Ingeniería.
En Filosofía los estudiantes piden la renuncia de la decana María Angélica González de Lezcano. Ayer renunció la vicedecana, Gladis Ríos de Recalde. Lo mismo hizo la integrante del consejo directivo Salvadora Giménez.
En Ciencias Agrarias un grupo de estudiantes piden la renuncia del decano Lorenzo Meza, quien tiene sin embargo respaldo de los docentes y otros sectores estudiantiles.
En Ingeniería UNA ya renunció el decano Isacio Vallejos y asumió en su reemplazo la ingeniera María Teresa Pino Rodríguez. En la seguidilla de renuncias en esta facultad están el director de la carrera Ingeniería Mecánica, ingeniero Diógenes Sartorio; el profesor investigador Juan Carlos Rolón; y el director académico, ingeniero Carlos Montero Volpe.
Conforme con la página oficial de la Facultad de Ingeniería, Montero Volpe fue derivado a un centro asistencial debido a su delicado estado (tuvo varias operaciones de corazón abierto, con varios bypass) tras el escrache que soportaron los miembros del consejo directivo en una reunión realizada el viernes pasado.
Ayer se informó el resultado de una reunión entre docentes y estudiantes, en la que se acordó respetar la institucionalidad, los reglamentos y a las autoridades legalmente constituidas, además de apoyar el reinicio de las clases y normalización de las actividades, bajo la garantía estudiantil.
En Medicina y Veterinaria no se normalizaron aún las actividades académicas, en espera de una total calma.