Un adiós indolente cada 24 horas

En el Día Mundial de la lucha contra el Cáncer de Mama podemos detenernos para conocer más sobre esta problemática que lacera con fuerza a la población femenina de nuestro país. Y también, para indignarnos con el servicio de salud nacional incapaz de brindar un tratamiento eficiente para la mayoría de las mujeres que padecen esta enfermedad.

Cargando...

Según los últimos datos proporcionados por el Ministerio de Salud, el año pasado han fallecido 368 mujeres víctimas de cáncer mamario, dando como resultado la penosa estadística de una muerte cada 24 horas. Dicen que la detección oportuna salva vidas, pero pareciera que solo ocurre en el extranjero porque aquí la única opción es la muerte.

Las sobrevivientes al cáncer de mama lo lograron por disponer de recursos económicos y apoyo de la familia, pero para las mujeres más vulnerables no existen opciones además de resignarse a morir o luchar por un tratamiento tortuoso, insensible e indignante.

Malos tratos y falta de medicamentos son queja constante, tanto en el Instituto de Previsión Social, como en el Instituto Nacional del Cáncer y el Hospital de Clínicas. Ni siquiera órdenes judiciales de por medio resultan para proveer medicamentos y evitar las criminales interrupciones de quimioterapia. Nada hace mella en la ya indolente estructura administrativa de estos nosocomios que justifican todo con la falta de recursos económicos.

Este día, además de vestir de color rosa, tiene que llamarnos a solidarizarnos con los enfermos de cáncer y a exigir a las autoridades respuestas concretas, como la aprobación del proyecto de ley de impuesto al tabaco, cuya recaudación iría a las arcas de Salud y Educación. La deshumanización en la atención a los enfermos crónicos también debe terminar y esa es una tarea que no necesita de recursos sino de vocación y amor al prójimo.

leticia.barrios@abc.com.py

Enlance copiado
Content ...
Cargando ...