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El informe de la Contraloría General de la República corresponde al ejercicio 2012, a cargo del intendente César Osvaldo Leiva Caballero (ANR).
Entre las irregularidades detectadas por los auditores del órgano contralor se menciona que los ingresos propios de las recaudaciones diarias del 2011 no se depositaron en tiempo y forma de manera regular.
Se hicieron desembolsos en concepto de honorarios profesionales (145), sin informes de trabajos ejecutados por G. 54.275.000.
La Comuna pagó G. 91.912.606 por combustibles y lubricantes en el 2011, sin cumplir en varias adquisiciones con los procedimientos de la Ley 2051/03 y sin informes que respaldan su distribución y consumo.
También transfirió a entidades educativas e instituciones sin fines de lucro, sin que las mismas efectúen la rendición de cuentas, por G. 96.119.000, en el ejercicio 2011.
La Comuna no transfirió a la Gobernación del departamento Central un monto de G. 99.377.489, del 2011. Tampoco transfirió al Ministerio de Hacienda ese mismo monto.
La administración municipal realizó desembolsos en concepto de fondo fijo sin rendición de cuentas por G. 13.375.547.
Igualmente se observaron erogaciones realizadas con fondo fijo de objetos del gasto no habilitados de conformidad a lo dispuesto en la reglamentación del uso de caja chica, por un monto de G. 17.644.670.
Curiosamente este resultado de auditoría no fue incluido aún en la página web de la Contraloría General de la República.