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La agente fiscal Arminda Rivas de Monges, de Ciudad del Este, se encuentra bajo investigación de la Fiscalía General del Estado.
El 23 de marzo último se dio a conocer la resolución que establece la auditoría de gestión, según se puede leer en la nota DGF Nº 903 de la Fiscalía General.
El objetivo es determinar su nivel de responsabilidad en la imputación contra Higinio Benítez Arrúa, Aurelia Nicolaus de Benítez, Raquel Nicolaus Fernández, Claudia Benítez Nicolaus y Fernando Benítez Nicolaus por falsificación de título de propiedad de una finca en Minga Guazú, Alto Paraná.
El acta de imputación Nº 40 del 13 de marzo de 2015 fue presentada por la agente fiscal objeto de auditoría.
El acta corresponde a la causa de hecho punible contra la prueba documental ante el supuesto de que la familia Benítez es responsable de falsificar el título del inmueble en Minga Guazú.
El predio fue comprado por Higinio Benítez en el año 1992; según la fiscala Arminda Rivas de Monges, sus hijos Claudia y Fernando actuaron en complicidad. En 1992 Claudia tenía 11 años y Fernando solo 9.
Plantear una imputación contra personas que en el momento del hecho punible tenían solo 11 y 9 años, raya con lo ridículo.
Tema Sarubbi, punto central
La imputación guarda relación con una acción de interdicto planteada por Enrique “Kike” Sarubbi contra Inmobiliaria HB SA, propietaria del inmueble localizado en Minga Guazú.
“Kike” Sarubbi presentó la denuncia por invasión de propiedad contra Inmobiliaria HB SA y reclamó la devolución de la finca.
Como prueba, Sarubbi presentó ante la fiscala Arminda Rivas de Monges un acta notarial donde consta que el señor Humberto Ramón Zapattini, anterior dueño, nunca vendió dicho inmueble a la inmobiliaria.
Como testigo se presentó Rossana Daniela Zapattini Suárez, hija de Humberto.
Según el acta, llegó como “testigo quien manifiesta que lo expresado por su padre se ajusta a la verdad”.
Rossana Daniela Zapattini Suárez tenía 9 años cuando Humberto Zapattini vendió la propiedad de Minga Guazú, según consta en el título de propiedad inscripto en los registros públicos.
“Kike” Sarubbi reclama derechos sobre la finca luego de ganar un juicio a su suegro, Francisco Feliciano Duarte, fallecido en el año 2000. El juicio por “cumplimiento de contrato” tuvo lugar en 2013. El finado perdió el juicio.
Con un título de propiedad ganado a un muerto, Sarubbi pide auxilio a fiscales y jueces de Ciudad del Este.
El representante legal de Sarubbi es el abogado Jorge Barrios; en Ciudad del Este se asegura que el financista es Estanislao Franco de Oliveira, alias “Chilao”.
roque@abc.com.py