Fue el primer mártir

El teniente 1º Adolfo Rojas Silva nació en Asunción el 22 de febrero de 1906 y fue asesinado el 25 de febrero, hace 91 años (1927) por soldados bolivianos en las proximidades del Fortín Sorpresa. El grave incidente fue condenado y forzó a reaccionar en defensa del Chaco, invadido por el enemigo. El poeta Emiliano R. Fernández utilizó su genialidad para llamar a la movilización y vengar el cobarde asesinato.

Cargando...

Su padre, don Liberato, era agrimensor y fue presidente de la República provisional entre 1911 y 1912. Su madre fue Susana Silva. Abandonaron nuestro país y se radicaron en Montevideo (Uruguay). Tras la muerte del padre, su familia retornó a Asunción en 1923.

El ministro de Defensa Nacional, Diógenes Martínez, relató que tres días después de cumplir 21 años de edad, Rojas Silva patrullaba y argumentaba la defensa de nuestras tierras ante los bolivianos cuando ya había hostilidades por el dominio del Chaco, tras cumplir la misión de tender las primeras líneas telegráficas en los fortines del interior del Chaco, un repentino estampido de disparos acabó con su vida el 25 de febrero de 1927. Añadió que así se convirtió en el primer mártir caído y que inspirados en él se convocaron en defensa de la heredad nacional hombres ancianos, mujeres y niños, quien también ofrendaron sus vidas durante la contienda que duró tres años, desde 1932 hasta 1935.

Enlance copiado
Content ...
Cargando ...