La causa del periodista González no se paralizó, según el fiscal

ENCARNACIÓN (José Miguel González, de nuestra redacción regional). El fiscal general adjunto del Estado, Edward Irala, dijo ayer que el caso del periodista Eduardo González, quien falleció el pasado domingo en Carmen del Paraná, no se paralizó.

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Afirmó que a fines de marzo del año pasado dio un instructivo particular en el que le ordenaba el cumplimiento de 15 diligencias al fiscal a cargo de la causa, Daniel Vergara, de la Fiscalía de Coronel Bogado (Itapúa).

El comunicador estuvo postrado en cama durante el último año por recibir fuertes golpes el 2 de marzo del año pasado. Fue encontrado inconsciente a la vera de la ruta Granero del Sur con golpes en la cabeza, nuca y espalda. Sin embargo, nunca se pudo dar con el o los responsables de la tremenda golpiza.

A pedido de un grupo de trabajadores de prensa, el fiscal solicitó el seguimiento del caso ante la presunción que estarían implicados policías. Pasó un año y no solamente fallece González, sino que pericias tan necesarias, como el cruce de llamadas de los dos celulares de la víctima, aún no fueron finiquitadas. “Falta que un técnico las analice”, expresó ayer el fiscal Irala.

Por otra parte, los padres del periodista González se quejaron que en todo este tiempo, las veces que fueron a declarar o preguntar sobre el proceso, nunca fueron atendidos por el fiscal de la causa Vergara, quien tampoco informó al fiscal general adjunto sobre el avance de las diligencias ordenadas hasta que fuera reemplazado por Lorena Castelvi.

Antecedentes

En setiembre de 2014, González trabajaba en “El Trigal FM” de la ciudad de Fram; mantenía una postura crítica ante las frecuentes denuncias de abigeato en la zona y la total inacción policial, incluso se hablaba de complicidad de los uniformados con los cuatreros. Cuando salía de una fiesta, un grupo de policías lo altearon en un camino vecinal y le “plantaron” bolitas de crack para incriminarlo, además de someterlo a apremios físicos en la Comisaría Nº 10 de dicha localidad.

González estuvo preso quince meses y fue sobreseído totalmente. En los días previos al 2 de marzo de 2016, los policías implicados iban a resarcirle –por daños y perjuicios– G. 50 millones, cosa que no ocurrió.

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