Para obispo de Caacupé, audios son regalo de Dios

CAACUPÉ, Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). En declaraciones a nuestro diario, el obispo de Caacupé sostuvo ayer que una Justicia a la medida no tiene sentido y si no es independiente, no funciona.

Subrayó que el Poder Judicial tampoco cumple una de sus premisas fundamentales de igualdad para todos, sin excepción.

En ese sentido, Mons. Valenzuela manifestó que mucha gente llega a Caacupé para rezar, suplicar para que no le quiten su casa, o se haga justicia en casos que involucran a algún miembro de su familia. “Es por ello que lastima que el poder económico y el tráfico de influencias sean los que dominen la Justicia, porque ahí un pobre está perdido”, remarcó.

Igualmente subrayó que es imposible que haya paz sin justicia. Mons. Valenzuela felicitó además a los que dan a conocer este tipo de graves hechos, porque la persona que no revela (estos audios) automáticamente se convierte en cómplice y debe ser condenado como tal.

Imputados y “sábana”

El obispo también se refirió a las elecciones internas previstas para mañana. Dijo que le preocupa la gran cantidad de candidatos procesados que se encuentran dentro de las listas sábana.

Es lamentable que personas entrenadas en la corrupción y en las cosas deshonestas vuelvan a ocupar cargos públicos por decisión del pueblo, aseveró el prelado.

Recalcó que de esta manera estas elecciones se convierten en un desafío muy grande para el pueblo y el electorado paraguayos.

“Necesitamos de políticos que hagan una buena gestión pública. Y el que no cumple con sus obligaciones debe ser procesado, abucheado y condenado por el pueblo, por lo que anhelamos que en las próximas elecciones se elija realmente a los mejores”, concluyó.

Monseñor Valenzuela fue el obispo que lanzó un duro mensaje al gobierno del presidente Horacio Cartes (colorado) en la homilía central de la misa de Caacupé el viernes 8 de diciembre pasado.

Justamente, en su alocución central en dicha fecha subrayó que “es necesario que en nuestro país surjan fiscales y jueces honestos, valientes, que hagan frente a estos que dicen ser servidores públicos y deshonestos y que se haga justicia con ellos (los magistrados)”.