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El pasado martes por la noche un equipo periodístico de este diario pudo constatar el momento justo cuando los ordeñadores bajaban combustible de una lancha a una casa vecina del puerto Terport. El carburante fue extraído del remolcador Tomás Romero Pereira, según los datos. El ilícito se realiza en complicidad con militares de la Armada Paraguaya, la Policía y hasta algunos vecinos.
La fiscala de la ciudad de San Antonio, María José Pérez, encabezó ayer la diligencia de peritaje del remolcador Tomás Romero Pereira, anclado en el Puerto de Petróleos San Antonio (Petrosan) del barrio Cándida Achucarro, tras la publicación de ordeño de combustible en la zona.
El perito naval Cap. Navío (SR) Juan Domingo Delgado Mereles se limitó a verificar los tanques de Romero Pereira y no así las barcazas que fueron remolcadas y estaban cargadas de combustible.
Acompañó a Delgado Mereles, además de la fiscala, el perito Miguel Barrios, quien es representante de la empresa Mercopar. El trabajo de sondaje abarcó 9 tanques del buque remolcador y se halló que uno de ellos estaba vacío.
La fiscala Pérez explicó que aguardará el informe detallado del perito, tanto del remolcador Taguató, propiedad de Lógico Paraguay SA, y del Romero Pereira, de Mercopar, para poder tomar las acciones pertinentes. Dijo que solicitará informe para determinar a quién pertenece la carga que contiene las barcazas amarradas en la zona para que puedan ser verificadas también.
Llamativamente, el jefe de logística de la empresa Mercopar, ingeniero Édgar Pereira, y el propio capitán Cáceres Gamarra, se negaron a hacer declaraciones a la prensa y solo se limitaron a decir que el proceso está en marcha.
El remolcador Romero Pereira ya fue denunciado por la gendarmería argentina el año pasado por ordeño de combustible en la zona de Pilcomayo. La causa también está a cargo de la fiscala Pérez.
Capitán en la mira
Según fuentes de la Armada, el capitán del remolcador Romero Pereira, Cáceres Gamarra, tendría varios antecedentes por supuestos hechos ilícitos. Ya en el 2001 habría sido denunciado por tráfico de combustible y de cigarrillo, pero habría sido salvado por sus contactos políticos de entonces. El marino retirado también tendría fuertes respaldos, ya que sería socio comercial de un familiar muy cercano laboralmente al presidente de la República, Horacio Cartes.