Veto de Cartes a Ynsfrán profundizaría la crisis

Por 34 votos sobre 45, el Senado eligió a Ynsfrán como candidato a la Corte Suprema de Justicia. Sin embargo, ello se da en medio de la pugna interna colorada y sin el previo consentimiento del Presidente. Por ello, hay fuertes rumores en el sector oficial de que Cartes vetará la designación.

Si el Presidente llega a objetar la propuesta, según fuentes del Senado, será tomado como una “declaración de guerra” que se trasladará, muy posiblemente, al terreno jurídico.

La Constitución nacional y leyes que rigen la materia no indican el camino a seguir, en caso de que se produzca una situación como la señalada, indicaron constitucionalistas consultados sobre el tema.

El titular del Consejo de la Magistratura, Enrique Riera, declaró en un programa televisivo que si Cartes rechaza al elegido por el Senado, entonces la misma Cámara Alta solo puede elegir un nombre de los dos restantes de la terna: Emiliano Rolón y Miryam Peña. Ello pondría en manos del Presidente la elección, con simplemente esperar que su candidato –que se presume es Emiliano Rolón– fuera el nuevo nombre remitido por el Senado. Sería una designación “por descarte”, señalan en el Senado. El argumento expresado por Riera encaja perfectamente con esa intención y hay que tener en cuenta que Riera es el representante de Cartes en el Consejo de la Magistratura.

Sin embargo, varios senadores como el titular del PLRA, Miguel A. Saguier; Juan C. Galaverna (ANR); Adolfo Ferreiro de Avanza País y el propio representante del Senado ante el Consejo de la Magistratura, Enzo Cardozo (PLRA), advirtieron que si Cartes veta a Ynsfrán, el Consejo debe hacer un nuevo llamado porque al producirse la objeción presidencial se desintegra la terna. “No estaríamos ya hablando de terna” sino de dúo, alertó Saguier durante la sesión ordinaria del jueves pasado.

Antecedente

El entonces presidente Fernando Lugo, actual senador del Frente Guasu, había vetado el 25 de agosto de 2009 el nombre del camarista Agustín Lovera Cañete, lo que desató un duro enfrentamiento con el Senado, que en ese entonces tenía 15 senadores colorados. Finalmente, Lugo fue destituido por ese Congreso por mal desempeño de funciones.