CITAS & HECHOS

https://arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/LYAFSO5YNZCSHLQ6UGWFAR7GSY.jpg

Cargando...

Friedrich Nietzsche (1844-1900) Filósofo alemán.

“En el amor siempre hay algo de locura, mas en la locura siempre hay algo de razón”.

Edgar Allan Poe (1809-1849) Escritor estadounidense.

“La ciencia no nos ha enseñado aún si la locura es o no lo más sublime de la inteligencia”.

Ray Bradbury (1920-2012) Escritor estadounidense.

“La locura es relativa. Depende de quién encierre a quién en la jaula”.

Mark Twain (1835-1910) Escritor y periodista estadounidense.

“Vamos a plantearnos que estamos todos locos; eso explicaría cómo somos y resolvería muchos misterios”.

Nerón y el incendio de Roma

Conversando Nerón con unos parientes suyos, uno de ellos citó este verso griego: “Que todo se abrase y perezca después de mí”. Nerón le corrigió diciendo que el verso debía decirse así: “Que todo se abrase y perezca viviendo yo”. Y una noche de julio del año 64 d. C. se declaró un atroz incendio en el área del Circo Máximo, en Roma. El viento propagó rápidamente las llamas, sembrando el terror entre la población. Tras seis días interminables de devastación sin tregua, se logró habilitar cerca del monte Esquilino una zona abierta para servir de cortafuegos. Entonces, se desató un segundo incendio, cuyo foco se localizaba en el barrio Emiliano, en una finca de Ofonio Tigelino, prefecto del pretorio y mano derecha de Nerón. El fuego arruinó la ciudad y dejó una estela de sospechas, que recayeron sobre Nerón y los culpables que él señaló: los cristianos. En el momento del incendio, Nerón llevaba 10 años a la cabeza del Imperio. En su primera etapa de gobierno había resultado un ejemplo de respeto a las tradiciones políticas romanas, pero comenzó a derivar hacia una forma de gobierno despótico. El episodio que originó este declive fue el asesinato de su propia madre, Agripina. No hay duda de que el incendio, ya fuera casual o intencionado, constituyó para Nerón su gran oportunidad para seguir fomentando una política orientalizante: ardieron los templos consagrados a los dioses que contenían todo lo que la Antigüedad había dejado de curioso y digno de memoria. Nerón estuvo contemplando el incendio desde la roca Tarpeya, encantado, según dijo, de la hermosura de las llamas. Lo concreto es que Nerón aprovechó el incendio para erigir su gran palacio: la Domus Aurea, mientras acusaba a los cristianos del desastre, para alejar de sí las sospechas. *

(*) Fuentes: Carandell, Luis. Las anécdotas de la política - http://www.nationalgeographic.com.es - http://proverbia.net

Recopilación: mpalacios@abc.com.py

Enlance copiado
Content ...
Cargando ...