Los presidentes del Paraguay: Carlos Antonio López Insfrán

El 13 de marzo de 1844, un congreso de diputados creó la Presidencia de la República y para ejercerla fue designado don Carlos Antonio López Insfrán, quien así se convirtió en el primer mandatario en ostentar dicho título.

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En sus 18 años de gobierno, el presidente López tuvo como vicepresidente a don Mariano González y, luego, a su hijo Francisco Solano López.
Su gabinete lo constituyó de la siguiente manera: Hacienda, Mariano González; Interior, José Falcón; Guerra y Marina, Francisco Solano López; y Relaciones Exteriores, Benito Varela, Andrés Gill, José Falcón, Nicolás Vázquez.
Nacido en Asunción el 4 de noviembre de 1792, don Carlos Antonio López estudió en el Colegio de San Carlos, llegando a vestir los hábitos menores aunque sin llegar a graduarse. Se dedicó a la docencia y a la abogacía, con suficiente versación de la legislación española, vigente en la República. Casado con una rica heredera, durante el gobierno del dictador Rodríguez de Francia se refugió prudentemente en su estancia del interior del país.
Cuando se estableció la Comandancia General de Armas, fue secretario de gobierno y, luego, con el segundo Consulado, pasó a integrar el mismo con Mariano Roque Alonso. Establecida la presidencia de la República, la ejerció desde 1844 hasta su muerte, el 10 de septiembre de 1862.
Algunas obras de su gobierno son: La publicación de los primeros periódicos; la firma de importantes tratados con los países vecinos; la creación del ferrocarril paraguayo (el sexto en América, después de Estados Unidos, Cuba, Chile, Perú y Argentina); la primera planta siderúrgica de Sudamérica; la compra y construcción de buques; la creación de la Escuela de Derecho Civil y Político; el Aula de Filosofía, la Academia Literaria, la Escuela Normal, de Matemáticas y de Latinidad; la habilitación del Seminario Metropolitano; la construcción de la Catedral de Asunción y varias otras iglesias de la capital y el interior del país; la construcción del edificio del actual Congreso nacional, primeramente destinada a sede del Gobierno; la estación de Ferrocarril, entre otras.
Los padres de don Carlos fueron don Miguel Cirilo López y doña Melchora Insfrán. Sus hermanos fueron Basilio, clérigo, obispo del Paraguay; Francisco de Paula, Martín, Juan Vicente, Victorino y Melchora.
A su vez, con doña Juana Pabla Carrillo, fue padre de Francisco Solano, Inocencia (casada con Vicente Barrios), Venancio, Rafaela (se casó con Saturnino Bedoya, luego con Milciades de Acevedo Pedra) y Benigno.

La Guardia Urbana

A finales de la década del '40, luego que los colorados se afianzaron en el poder, surgió una organización parapolicial conocida con el nombre de "guardia urbana", que convirtió a los presidentes de seccionales de la Asociación Nacional Republicana en milicianos que recorrían las calles de Asunción y algunas ciudades del interior, controlando la actividad de los ciudadanos. De gran poder intimidatorio, su propósito fue hacer notar la supremacía del Partido colorado en el poder. Este grupo actuó a lo largo de los años '50 y parte de la década siguiente.

Compras de armas

En los comienzos de 1929, el presidente José P. Guggiari creó una comisión profusil, compuesta de tres miembros, que fue integrada por el doctor Manuel Bedoya, don Zacarías Battilana y don Manfredo Russo. Esa comisión llegó a reunir la suma de 5.726.823:93 pesos de curso legal, aportados por todos los empleados públicos (equivalente a un mes de sueldo), Los oficiales del ejército se habían negado a que se les descontara, pues –argumentaron- que a ellos, en caso de guerra, les correspondía dar su sangre en defensa de la patria. Aun así, oficiales de algunos regimientos contribuyeron con dos mil pesos, importe de dos fusiles. Varias empresas extranjeras también hicieron su aporte, así como algunas nacionales.
Con la ayuda de esta comisión, el gobierno pudo adquirir: 7.000 fusiles Máuser, modelo paraguayo, calibre 7,65, cañón corto, incluso cubre-miras y bayonetas con vainas de acero, adquiridos en la Fábrica Nacional de Armas de guerra Herstal, de Lieja (Bélgica), al precio de 27:75 dólares c/u (194.250 dólares); 200 fusiles ametralladoras Madsen para infantería, calibre 7,65 mm. con tapa-llama, trípode y demás accesorios, adquiridos de la fábrica Danskre Kilriffel Syndikate de Copenhague (Dinamarca) por 1.222:80 dólares c/u (244.560 dólares); 10.000.000 de cartuchos para ametralladoras y fusiles, calibre 7,65 mm., a 26:25 dólares el millar, adquiridos de la misma fábrica Herstal de Lieja (262.500 dólares); pago de fletes, seguros y otros gastos (28.690 dólares), completando un total de 730.000 dólares americanos. O sea, 32.682.100 pesos. El aporte de la comisión fue de 5.726.823:93 pesos y lo puesto por el Estado: 26.955.276:07 pesos.

La obras de don Higinio

Durante los años de gobierno del presidente Higinio Morínigo, se asfaltaron varias arterias capitalinas; así mismo, se produjo la supresión del Mercado Central y creación de mercados barriales en Asunción, instalación de desagües y cloacas, se crearon colonias agrícolas y numerosas obras públicas. Se crearon el Instituto de Previsión Social, la Flota Mercante del Estado, la Escuela de Humanidades (base de la Facultad de Filosofía de la UNA); la Escuela de Técnicos Industriales y escuelas normales, la apertura de Corporación Paraguaya de Carnes, la Corporación Paraguaya de Alcoholes, el Cimefor, el Instituto Geográfico Militar, se realizó la reforma monetaria y se instauró el Guaraní como signo monetario. Se estableció una nueva organización territorial, con la creación de 16 departamentos.
Por otra parte, el ambiente político enrarecido fue creando enconos, desavenencias, odios y rencores que desembocaron en el más nefasto capítulo de la historia política paraguaya: la revolución de 1947, que más que revolucionar la sociedad paraguaya, fue una guerra fratricida, cuyas consecuencias aún se sienten.
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