Sonidos de vals

Sonidos de la Tierra celebrará su 15.º aniversario con un Seminario y Festival Nacional de Orquestas y Arpas, que se realizará del 18 al 21 de julio en Ypacaraí. Alrededor de 3000 jóvenes unirán su música y talento para este festejo.

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Inspirado por el maestro Luis Szarán y con el apoyo de Lucha Abbate nació Sonidos de la Tierra, en el 2002, programa institucional de la Asociación Tierranuestra que promueve el desarrollo humano y social sostenible en el Paraguay. Enfocado en el concepto de educación a través del arte, el programa ha permitido, en los últimos 15 años, el acceso directo a la educación musical a más de 18.000 niños y jóvenes de escasos recursos en 210 comunidades del Paraguay, mediante la formación de escuelas de música gratuitas, agrupaciones corales y orquestales, asociaciones culturales o sociedades.

Sonidos de la Tierra surgió como un proyecto luego de que el maestro Luis Szarán se diera cuenta del inmenso potencial que tiene la música para la transformación social, crear valores y despertar la conciencia. “Así comenzamos con una red de escuelas de música y orquestas juveniles e infantiles en 18 pueblos, hace 15 años”, comenta el maestro.

El programa apoya, además, el fortalecimiento de la identidad nacional al promover la recuperación de las manifestaciones culturales y el rescate de los valores fundamentales de la tradición de los pueblos, potenciando, principalmente, la autoestima de los jóvenes. Sonidos de la Tierra cumple 15 años con miles de historias inspiradoras y transformaciones, reales y positivas, utiliza la música como punto de entrada para crear capital social y reducir la pobreza en el Paraguay.

“Creo que este programa de integración social es la mejor obra del maestro Luis Szarán; busca, fundamentalmente, formar buenos ciudadanos a través de la música”, afirma Lucha Abbate, directora ejecutiva de Tierranuestra. Desde sus inicios, el programa ha permitido el acceso directo a la educación musical a más de 18.000 niños, niñas y jóvenes de escasos recursos de 210 comunidades en 16 departamentos del Paraguay. 

“Así, el primer convenio que se concretó fue en Caacupé”, refiere el maestro. Para agosto del 2002 ya estaban funcionando 18 comunidades musicales con unos 600 alumnos y un elenco de profesores itinerantes bajo el concepto de Conservatorio sobre Ruedas. Este es un sistema innovador mediante el cual un equipo de instructores itinerantes recorre las comunidades para impartir clases de música. Los profesores son músicos profesionales, especializados en la enseñanza de múltiples instrumentos. Como resultado de este trabajo, se forman las orquestas infanto-juveniles en todo el territorio nacional.

Szarán cuenta que, como se trata de un programa que requiere de plena participación comunitaria, la principal barrera en ese momento era la bajísima autoestima, desesperanza en las comunidades rurales y desconfianza. “Al comienzo, en algunos sitios, decían que era una secta religiosa o que detrás habría algún interés político”, recuerda.

Sonidos de la Tierra enseña a niños y adolescentes a ejecutar instrumentos musicales, formar parte de agrupaciones musicales y contribuir a la vida cultural de sus comunidades. “Estas experiencias instalan en los jóvenes la responsabilidad, perseverancia y el trabajo en equipo. Como resultado, los participantes tienen un mejor desempeño académico, relaciones familiares más armoniosas y menos conflictos con sus pares”, señala Abbate. 

Para la incorporación de habilidades para la vida (como la autoestima, capacidad de organización y gestión participativa), esenciales a nivel personal y social para ser emprendedor y enfrentar la pobreza, Sonidos ha desarrollado la metodología “La Orquesta Escuela de Vida”, que utiliza como herramienta la música y, para cumplir sus objetivos, promueve la formación de escuelas o conservatorios de música, agrupaciones corales y orquestales, asociaciones culturales o sociedades filarmónicas y talleres de lutería. Las comunidades con las que trabaja –encabezadas por las “Comisiones de apoyo” (padres y voluntarios) conforman conservatorios de música locales y sociedades filarmónicas y con capacitación proporcionada por Tierranuestra– son capaces de recaudar fondos, planificar y llevar a cabo proyectos comunitarios. 

Con la metodología “aprender en y para la acción” se busca impulsar la gestión de los adultos integrantes de las comisiones de apoyo, para el desarrollo de proyectos y generación de alianzas, y junto con el equipo técnico de Tierranuestra conforman la “orquesta que no se ve”, que por medio de un trabajo comprometido y planificado consiguen impulsar el programa.

Luis Szarán rescata de estos 15 años de labor la obsesión por la perfección en la gestión, formando equipos dinámicos, creativos, innovadores, con mística, pasión, respeto y transparencia. “Trabajamos con niños y adolescentes, y es lo más sagrado que tenemos en nuestra nación. ¡El equipo! Tan pocas personas administran un programa gigante, los profesores que recorren con mucho sacrificio, los coordinadores y locales, las familias, las fuerzas vivas de cada comunidad; los y donantes, que ven en sus aportes una buena inversión para la sociedad en la que vivimos. Yo agrego solamente los condimentos: la alegría de vivir, contagiando amor y belleza a través de los sonidos. Todo lo demás hacen ellos, pero no sería posible sin el liderazgo firme e inspirador de Lucha Abbate”, enfatiza.

Resalta que pretende asegurar que Sonidos de la Tierra siga iluminando el camino de niños tristes, adolescentes sin rumbo, personas que viven solo de conflictos y encerradas en las prisiones. “Quiero ingresar en el mundo de la innovación tecnológica para hacer más accesible el programa a más personas no solo en el Paraguay, sino en todo el planeta”.

Sonidos de la Tierra se sostiene con aportes y donaciones de organizaciones internacionales, además de patrocinios de empresas privadas, generando importantes contrapartidas en el seno de las comunidades con las que interactúa.

Celebración 

Elio Fleitas, director académico y artístico de la orquesta, cuenta que el festejo se realizará con actividades como El Seminario y Festival Nacional de Orquestas Juveniles de Sonidos de la Tierra y el Festival Nacional de Arpas Paraguayas, que se llevarán a cabo del 18 al 21 de julio, en Ypacaraí, donde 3000 niños y jóvenes formarán parte de esta gran experiencia de intercambio musical, educativo y comunitario. 

“Este multitudinario evento se realizará con gran parte de los representantes de las 63 comunidades de distintos puntos del país, como Repatriación, Belén, Horqueta, Encarnación, Pilar, Mcal. Estigarribia, Areguá, San Juan Bautista, Quiindy, Yaguarón, Yegros, Tacuatí, Puerto Casado, Chacarita, entre otras, así como la ciudad anfitriona, Ypacaraí, coorganizadora de este multitudinario evento”, comenta.

H2O

En el 2012, Sonidos de la Tierra lanzó una iniciativa innovadora: la orquesta H2O – Sonidos de la Tierra, con instrumentos elaborados con materiales relacionados con el agua, como botellas, caños, mangueras, embudos, cántaros, etc., para promover el buen uso del agua limpia. Esta agrupación es la orquesta emblema de H2O Sonidos del Agua, un proyecto a nivel nacional de educación y concienciación ambiental a través 50 orquestas en todo el país, que cuenta con el apoyo de Fundación Itaú y Art Mentor Foundation Lucerne.

Festival de los Pueblos y Megaconcierto

Los días 18, 19 y 20, a las 20:00, se realizará el Festival de los Pueblos en la Estación Tacuaral de Ypacaraí. El viernes 21, a las 19:00, en el estadio Bicentenario de Ypacaraí se celebrará el 15.º aniversario con un megaconcierto. Unos 2000 niños y jóvenes músicos serán parte de la Megaorquesta de Sonidos de la Tierra, entre los que se destacan 400 arpas paraguayas; se suman 1000 niños de Ypacaraí, que desde hace semanas están ensayando para conformar el Megacoro. Todos los eventos son gratuitos.

Aportes

El programa ha contribuido con el fenómeno del despertar del arpa paraguaya con más de 600 nuevos intérpretes en toda la República. Además, fundó una orquesta internacional denominada Weltweite Klänge (Sonidos del Mundo) en Núremberg, Alemania, en el 2006, uniendo jóvenes talentos de América, Europa, África y China. Esta agrupación ha actuado en más de 200 conciertos solo en Europa. En el 2017, la Orquesta y voces de Sonidos de la Tierra se presentó en 18 ciudades de cinco países europeos ejecutando música Barroco Guaraní; además, este mismo grupo ha grabado un disco con el mismo repertorio que será distribuido en Europa por el prestigioso sello Naxos.

mpalacios@abc.com.py

Fotos: Gentileza.

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