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Además, las investigaciones científicas y la literatura especializada han podido comprobar que las aves que se han manejado en condiciones de bajo o nulo bienestar animal (BA) son más susceptibles de contraer enfermedades y otras lesiones. Además, los índices de mortalidad son mayores. Por eso es importante que los avicultores reconozcan el valor de las normas del BA en la cría de aves, buscando minimizar el impacto del estrés y el sufrimiento durante el manejo de estas especies. Con ello se podrá ofrecer al mercado local e internacional no solo productos sanos y de calidad, sino que, también, elevar la rentabilidad de los emprendimientos avícolas a diferentes escalas económicas.
EL BIENESTAR ANIMAL
Se trata de un enfoque que cobra cada día mayor relevancia en la cría comercial de animales, por cuanto se parte de la base que son seres vivos que necesitan satisfacer sus necesidades fisiológicas básicas; estar sanos y poder comportarse en forma adecuada frente a los cambios ambientales. En avicultura se busca brindar a las aves un trato digno, con respeto a su fisiología y características naturales, de tal forma que cuando un consumidor local o de otro país adquiera carne de pollo, pato y huevos con un sello de garantía sepa que adquiere un alimento sano, inocuo, criado en forma amigable con el ambiente y cumpliendo con las normativas de este enfoque.
NORMAS
La cría de aves con enfoque de BA debe cumplir con varias normas: aves libres de sed, hambre y malnutrición, para lo cual tienen que disponer de agua limpia y buenos balanceados según las etapas de crecimiento. Tienen que criarse libres de incomodidad, lo que se relaciona con la densidad o espacio por metro cuadrado; la aireación, temperatura, iluminación, calidad de la cama. Deben estar libres de dolor, lesiones y enfermedades, para lo cual es importante contar con un plan sanitario con controles de bioseguridad periódicos y personal entrenado para estas tareas.
CONCLUSIÓN
Con el cumplimiento de las normas del bienestar animal es posible disponer de alimentos avícolas y derivados inocuos. De este modo, se fomenta la producción sustentable, se cuida la salud de productores y consumidores, y se preserva el ambiente y sus recursos.
(*) Especialista en Comunicación Rural