Siembra de semillas en bandejas - Ing. Agr. Heriberto Huerta (*)

Tras la preparación del suelo, que contempla el análisis y el consiguiente agregado de nutrientes, el postrer paso es la siembra de las semillas. Cabe destacar que en horticultura dicha labor no se ejecuta directamente en el campo (lugar definitivo), sino más bien en un espacio denominado semillero. Luego, cuando se obtengan los primeros brotes, será posible el traslado a la huerta.

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El semillero es el sitio donde se siembran las simientes de las plantas para que, una vez germinadas, puedan trasplantarse a un criadero o al lugar definitivo. El productor hortícola debe contar con la infraestructura adecuada para realizar el trabajo, debido a que las semillas y sus brotes deberán estar protegidos, con las condiciones de ambiente ideales para el desarrollo.

Existen consideraciones técnicas a fin de lograr una producción óptima.

BANDEJAS

El productor, dedicado a la horticultura propiamente dicha, conoce y trabaja desde hace mucho tiempo con las bandejas de siembra que son recipientes que cuentan, en su mayoría, con 118 celdas, para la colocación del sustrato en el que se desarrollará la semilla. Los materiales del contenedor pueden ser de isopor o plástico; el segundo es más resistente, por lo que podrá reutilizarse.

MANEJO DEL SUSTRATO

Las bandejas se cargan con tierra preparada, la cual viene en bolsas comerciales; algunas con base de material compostado, otras con mezcla de turba y compostada, además de la que es solo turba.

La recomendación habitual es el uso de cinco litros de agua por cada bolsa del sustrato. Se mezcla bien y se carga en las bandejas de manera uniforme cubriendo cada celda. Luego, se marcan los agujeros en el medio de cada celda que, teóricamente serán tres a cinco veces menor que la semilla. Los profesionales técnicos indican una profundidad máxima de 1 cm para colocar las simientes. Posteriormente, se colocan las semillas y se riega.

MANEJOS POSTSIEMBRA

Tras la siembra, las bandejas deberán colocarse en un galpón, unas encima de otras, y controlar la brotación. Si necesita de riego, reponer el agua y, una vez brotado, colocar dentro del semillero.

El sustrato comercial cuenta con una base nutricional de modo a que las semillas germinen y, en su etapa de plantines, se mantengan vigorosas, hasta el trasplante al lugar definitivo. Sin embargo, siempre es importante observar su desarrollo y que lleguen bien al momento del traslado.

Permanece en las bandejas hasta los 30 días para después llevar al trasplanta, mientras que el tomate se queda 18 a 22 días, dependiendo de la plantita.

ESPACIO IDEAL

Para la preparación de mudas es fundamental contar con un espacio ideal, en cuanto a temperatura y humedad, además de lo protección contra los rayos ultravioleta. Si el horticultor saca plantas malas del semillero, sufrirán inconvenientes en el lugar definitivo. Las bandejas deben estar en altura y no en el suelo. La recomendación es ubicarlas en mesadas, a la altura de la cintura para un manejo práctico. Dependiendo de la capacidad del productor, cubrir el espacio con un túnel de plástico para proteger a las plantitas en su primer estadio. También la media sombra permitirá paliar el exceso de calor.

La temperatura ideal para la germinación de semillas es de 25 y 28 %, acompañado de un riego moderado, debido a que la combinación de excesivo calor y elevada humedad propicia la aparición de hongos.

MALAS PRÁCTICAS

Existen varios productores que no manejan adecuadamente la colocación del sustrato en las bandejas, sea por el mal cargado, compactación o, incluso, otros dejan muy aireadas las celdas de la bandeja, con lo que al momento del riego, el agua chupa las semillas y las tira hacia abajo. Existen, a su vez, agricultores que riegan de más. En cada caso es importante conocer el tipo de sustrato utilizado para efectuar una irrigación ideal.

CONTROL DE PLAGAS Y ENFERMEDADES

La indicación agronómica habla de hacer al menos dos aplicaciones de defensivos sistémicos contra insectos, a los siete y 10 días de la siembra, sumado a una dosis de fungicida sistémico al día siguiente para evitar el ataque de hongos como el “mal del cuelo”, por ejemplo, que ataca en la bandeja. En el caso de notar falta de nutrición, aplicar fertilizantes en dosis indicadas por un profesional.

DESINFECCIÓN DE BANDEJAS

Las bandejas de germinación deben ser desinfectadas después de cada uso y no solo guardadas. Entre los productos utilizados para la limpieza figuran el oxicloruro de cobre o lavandina.

(*) Especialista en horticultura

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