El Proyecto Níquel, en marcha

Con el objetivo de que los gastos de personal y administrativos se sitúen en un 22 % sobre el total de los costes del Grupo BBVA en el mundo, está en su fase inicial el Proyecto Níquel. En una entrevista exclusiva con EN, el director de Recursos Humanos de la entidad, Juan Ignacio Apoita, explica en qué consiste.

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El Grupo BBVA contempla una inversión de USD 2500.000.000 para los próximos años (2013-2016) en América del Sur, por lo que no se puede hablar en términos generales de si habrá o no recorte de la plantilla del banco, ya que en cada geografía se actuará de manera acorde a la estrategia que permita a la empresa ser más competitiva.

El objetivo es convertir a la entidad financiera en el primer banco digital de la región y el preferido de los clientes. En ese sentido, América del Sur es un área fundamental en la evolución del grupo. Con los proyectos de crecimiento y expansión de red de oficinas, lo más probable es que se contrate más gente.

Buscando acomodar los recursos del banco, empezó a operar en el BBVA el Proyecto Níquel, para que los gastos de personal y administrativos sean un 22 % sobre el total de los costos del grupo, similar al de otras firmas españolas y europeas de igual tamaño, pero este porcentaje no es un “dogma de fe”, afirma el director de Recursos Humanos del Grupo BBVA, Juan Ignacio Apoita.

Para ello, está previsto eliminar duplicidades, intensificar la informatización y recortar gastos prescindibles. No se prevén despidos, pero sí un aumento de las prejubilaciones voluntarias, indica.

El perfil del colectivo de empleados de BBVA (110.000 personas distribuidas en más de 30 países) es el de un equipo joven, en promedio de 37 años, asignado de forma bastante equilibrada entre hombres y mujeres, aunque poco más del 50 % es femenino. Poco menos de 40.000 personas trabajan en México; casi 30.000, en España; alrededor de 30.000, en siete países de América del Sur, y unas 11.000, en EE. UU.

“El Proyecto Níquel nace respondiendo a nuestra vocación de ser una empresa eficiente y de aplicar nuestras mejores posibilidades en términos de tecnología a nuestros procesos de operaciones, en general al de back office y funciones de servicios centrales. Nuestro objetivo es, de manera creciente, que nuestra fuerza de venta aumente y la de áreas de apoyo tenga menor peso”, detalla Apoita.

El proyecto se lanzó en 2013, con el objetivo de que en 2014 y 2015 se puedan identificar las oportunidades de mejora, que se irán ejecutando gradualmente en función de las posibilidades que vaya teniendo la empresa.

“Lo estamos haciendo país a país y función a función. No hay una regla única ni un porcentaje único, sino que son algunas cifras de referencia, y pensamos que eso nos permitirá ser una organización más sencilla, eficiente y más orientada a la venta, al cliente final”, cuenta Apoita.

La idea de esta reestructuración es orientar al banco más a la venta, con nuevas funciones o líneas de negocios que se vayan a emprender. “No creo que detrás del Proyecto Níquel vaya a haber un grandísimo ajuste en términos de reducción de plantilla, sino que redistribuiremos las funciones; en algunos casos es posible que se dé paso a una plantilla inferior y en otros no, porque estamos en proyecto de crecimiento”, aclara Apoita.

Las prejubiliaciones o jubilaciones anticipadas son una fórmula más dentro de las opciones de las organizaciones para gestionar las bajas, sobre todo cuando las personas están más cerca de la edad del retiro, que en cada país es distinta.

En el Paraguay

El Proyecto Níquel se empezará a aplicar en nuestro país en junio próximo. En ese marco, vendrá un grupo con una metodología que enseñará cómo se trabaja, qué se debe medir, qué relevar para la optimización del trabajo. “Quieren saber cuáles son los entregables (informes y reportes) por área, por persona, para saber si no se duplican, si hay más de un área haciendo lo mismo, cruzar la información para hacernos más eficientes”, explica Sonia Chena, gerente de RRHH de BBVA en el Paraguay. Indica que con el programa Gestión Diferenciada, de entrevistas personales con los empleados para conocer más a fondo su formación, proyección a dos años, se conoció también el potencial individual, que permitió la reubicación, de cara a su mayor eficiencia.

Buen posicionamiento

El BBVA se ubicó en el Paraguay por segundo año consecutivo en el ranking de las mejores empresas para trabajar, elaborado por Great Place to Work. Se valoró especialmente el compromiso con la transparencia, la objetividad e igualdad de oportunidades. Crear un entorno de trabajo colaborativo es crucial para el éxito, máxime en circunstancias como las actuales, en que la velocidad de reacción y anticipación a los cambios determinará la supervivencia empresarial. Otro aspecto observado fue el modelo de gestión de personas, orientado al desarrollo profesional.

silvana.bogarin@abc.com.py

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