El calendario asigna una fecha: el 30 de agosto, para analizar, recordar y destacar la contribución valiosa de hombres y mujeres que velan por la seguridad ciudadana, desde las filas de la institución policial. Como reconocimiento por la ardua labor que cumplen para alcanzar la tranquilidad y la seguridad de toda la ciudadanía paraguaya, en estos tiempos difíciles, presentémosles nuestra gratitud y resaltemos algunas de las tantas funciones que desempeñan. El agente de Policía es aquella persona que ha elegido como profesión el servicio a la comunidad, en este caso, seguridad. Para cumplir eficientemente su trabajo, se capacita permanentemente en leyes, ahondando sus conocimientos en Código Penal, Derechos Humanos y Formas de Detención.

Como debe inspirar confianza en las personas, no descuida su aspecto personal, estado físico, alimentación, el trato y la facilidad de palabras. Los policías no solo se dedican a patrullar, vigilar y arrestar delincuentes, además visitan las instituciones educativas dando charlas pedagógicas sobre prevenciones de accidentes, drogadicción, etc. Muchos agentes custodian la entrada y salida de los niños y jóvenes a las escuelas y colegios. Que cada agente de Policía de nuestra comunidad sienta que valoramos su función; que por el Día del Agente de Policía le llegue un fuerte apretón de manos y fuerzas para seguir cumpliendo honestamente su importante misión de proteger a quienes ven en su figura al custodio del Estado de Derecho, como también su sagrado deber de velar por la seguridad ciudadana.