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SAN IGNACIO, Misiones. (Rafael Marcial Montiel, corresponsal). Los preparativos son intensos, tanto en el teatro El Molino de San Ignacio como en la barraca de Tañarandy.
El próximo Viernes Santo habrá más cuadros vivos, los jóvenes del teatro El Molino, bajo la dirección de Macarena Ruiz, representarán “La última cena”, en el contexto actual bajo el pontificado del papa Francisco y La Piedad inspirada en la mujer paraguaya que perdió a su hijo por la injusticia de la vida.
En el teatro El Molino y en la Barraca los artistas trabajan para adornar el altar con 7.000 espigas de maíz, además con los frutos naturales del coco y las hojas del pindó.
La decoración se concentra en El Molino, situado sobre la avenida Félix Bogado esquina Cerro Corá, en el centro de San Ignacio, entre tanto obreros y artesanos instalan los altares en la Barraca situada a la entrada de Tañarandy.
La procesión del Viernes Santo con la Virgen Dolorosa y los estacioneros se llevará a cabo por el Yvaga rape, camino vecinal que será iluminado por unos 15.000 candiles y 3.000 antorchas, por donde pasará la procesión.
Luego, la actividad cultural se desarrollará en el centro cultural La Barraca, del artista plástico Koki Ruiz, quien explicó que esos elementos decorativos simbolizan la importancia del maíz para los guaraníes, y que en este caso también son utilizados para diferenciar de los altares europeos revestidos de oro.
Este año también se instalará en el centro del altar adornado la Virgen del Maíz, cuya vestimenta será revestida en su totalidad por las espigas y chalas del maíz, subrayó Koki Ruiz.