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Entre los sectores más críticos está el trecho que se encuentra en el inicio de la vía en Paraguarí, a un kilómetro del cruce con la Ruta I “Mariscal López”.
En la zona el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) realizó algunos rellenos y remiendos, pero estas obras no duraron ni un mes.
Otros lugares en lamentable estado es en la zona de Ybytymí y en el kilómetro 107.
Según los automovilistas, los trabajos sufren un rápido deterioro porque la ruta se construyó sobre una base floja y sin la compactación necesaria.
El mal estado del tramo rutero causó innumerables accidentes de tránsito, inclusive algunos con derivación fatal.
La obra, que incluyó un ramal de 36 kilómetros para unir Tebicuary con La Colmena, fue construida mediante un préstamo otorgado por el Banco del Japón para la Cooperación Internacional (JBIC).
Costó unos 40 millones de dólares, más una ampliación de 4 millones de dólares. Empezó en agosto del 2004 a cargo del Consorcio de Ingeniería Vial, representado por el ingeniero Isacio Vallejos, y la empresa M y T, del arquitecto Julio Mendoza Yampey.
Los trabajos culminaron en 2011, con cuatro años de atraso.
Nueva compactación
El intendente de Ybytymí, Néstor Casimiro González (PLRA), lamentó el pésimo estado del tramo rutero. Dijo que a diario recibe innumerables quejas de pobladores.
Explicó que, según su experiencia como ingeniero civil, la única solución sería realizar nuevas excavaciones en varios puntos críticos para una nueva compactación.
Añadió que luego es necesario un recapado total para cubrir las huellas de los camiones de gran porte.