Asesinato de pareja belga

La noche del 3 de marzo de 2010, una banda de asaltantes atacó a tiros la residencia de un matrimonio belga, ubicada en la compañía Tejuguy de Piribebuy. El resultado de la balacera terminó en la muerte de sus moradores y de uno de los malvivientes. La Policía inició una investigación que derivó en la captura de algunos de los involucrados.

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Jacques Pierre Frederic Gerard Graulds (66) y Tholen Marcelle Roberte Henriette (78) conformaban un matrimonio belga de jubilados que, como muchos europeos, eligió el Paraguay para fijar domicilio en una villa tranquila, lejos de lo que significa la ajetreada vida en las ciudades del Viejo Continente. Eligieron una zona boscosa y aislada de la compañía Tejuguy de Piribebuy, en el departamento de Cordillera, donde edificaron una casa con todas las comodidades necesarias.

Sin embargo, estaban en la mira de una gavilla de malvivientes que hacía tiempo operaba en Cordillera y cuya modalidad delictiva consistía en asaltar las lujosas y aisladas viviendas de jubilados europeos para apropiarse de todas sus pertenencias de valor. Alemanes, suizos y austríacos figuraban entre sus víctimas.

La noche del 3 de marzo de 2010 la pareja cenaba en el quincho de la casa, en compañía de una extranjera, posiblemente de nacionalidad alemana, cuando de entre los matorrales salieron cuatro hombres con la cabeza cubierta con pasamontañas y armas de fuego en mano.

Los asaltantes ingresaron fácilmente a la casa, que no tiene muralla, y efectuaron disparos contra la pareja, mientras que la invitada, asustada, corrió a refugiarse entre los matorrales.

Tholen Roberte Henriette falleció al instante a causa de los impactos de bala que acusó, pero Jacques Graule, a pesar de estar gravemente herido, respondió a los disparos con un arma que tenía consigo y baleó a dos de los maleantes, ante de sucumbir. Uno de los heridos murió en el sitio, mientras que el otro escapó auxiliado por sus dos cómplices.

Cuando la testigo salió de entre los matorrales, vio la presencia de policías en la casa de los belgas y contó lo ocurrido a los investigadores.

Desenlace y consecuencias 

El esclarecimiento del caso tuvo su primer resultado con la identificación del cadáver del asaltante abatido, quien resultó ser Eliseo Da Silva Giménez. 

Se trataba de unos de los líderes de una banda que hace tiempo asolaba el departamento de Cordillera y se le atribuía al menos 20 golpes domiciliarios en viviendas aisladas, principalmente extranjeros por su alto nivel económico.

A partir de su individualización, los efectivos policiales pudieron dar con la identidad a los demás miembros y desarticular a la organización, con el arresto posterior de Cristian de los Santos Méndez Ramírez. Derlis Espínola Moreno, otro autor del asalto y asesinato de los europeos, fue eliminado por sus cómplices durante una disputa surgida por la repartija

Luego fue capturado Julián Villar -hermano del asaltante José “Coco” Villar, acribillado en 1999, quien tomó el mando de la gavilla tras la muerte de Da Silva. 

Los últimos en ser detenidos fueron Miguel Belotto, Miguel Enciso, Juan Carlos Mendoza, Teresio Da Silva, Carlos Genaro Méndez y Roberto Franco Pereira. 

El caso quedó prácticamente resuelto. Sin embargo, el luctuoso episodio y los golpes efectuados por la banda con anterioridad al hecho sentó un negro precedente para la imagen del país por la inseguridad existente en las zonas de Caacupé, Piribebuy y San Bernardino para aquellos jubilados europeos y norteamericanos que buscaban asentarse en nuestro territorio. 

cazenave@abc.com.py

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