Un nadador que se siente como pez en el agua

¿Qué es este deporte para vos?

La natación es mi estilo de vida; no hago otra cosa que no sea eso. Me dedico plenamente a nadar y por eso soy prácticamente un profesional.

¿Cuál fue el sentimiento que tuviste al representar al Paraguay en los Juegos Olímpicos de la Juventud en China?

Fue un orgullo. Estoy muy contento y agradecido de haberlo hecho, porque no todos tienen las mismas oportunidades que yo.

¿Qué sentís cuando escuchás el himno nacional en el exterior?

En un sudamericano me tocó escuchar el himno; fue muy emotivo y comencé a llorar. Me quedé en blanco por un instante y luego pensé en todo mi esfuerzo para llegar hasta ahí.

Si no fueses nadador, ¿qué serías?

Creo que seguiría siendo deportista. Aunque no me veo haciendo otra cosa que no sea natación, me gusta mucho el vóley y también el atletismo, debido a que mi mamá me entrenaba de joven.

En las competencias internacionales, ¿qué te preguntan los extranjeros acerca del Paraguay y qué respondés?

Al escuchar sobre nuestro país, muchos se quedan sorprendidos, interrogándose: ¿qué es el Paraguay? Algunos lo conocen por el fútbol y lo logrado en el Mundial de 2010. Les digo que está en América.

Cuando acabe tu carrera como nadador, ¿qué harás?

Me veo como ayudante de mi entrenador; no estando dentro de la pileta, sino afuera, aportando todas mis experiencias a los atletas.

¿Cuáles son los objetivos que te proponés como atleta?

Me gustaría ser medallista olímpico. Además, de la misma manera en la que me destaco en la natación juvenil, deseo hacerlo en la categoría de mayores.

Por Aristides Arámbulo (18 años)