Cargando...
¿Por qué trabajás?
Laburar influye bastante en mi persona, además, debo ayudar a mi familia. Es bueno el trabajo, ya sea vendiendo yuyos, ropas o cualquier cosa porque tratás de salir adelante y no estás perdiendo tu tiempo.
¿Cómo es el día a día en tu puesto de trabajo?
Es un esfuerzo, pero sirve el sacrificio desde joven porque estás construyendo tu cimiento, una base sólida para buscar trabajo el día de mañana. También para cuando encuentres a alguien ya tengas algo que compartir u ofrecer.
¿Creés qué debés aportar económicamente en la casa?
Sí, siento la necesidad de ser útil para mi familia, a los que necesitan de mí y marcar la diferencia como pueda.
¿Qué es lo que más anhelás?
Mis deseos son poder salir adelante en todo, con la ayuda de Dios, en cada cosa que me proponga a hacer. Sé que Él siempre me fortalecerá, me apoyará y me dará sabiduría. Tomar esos conocimientos para ser alguien importante en la sociedad. En un futuro cercano ayudar a otras personas con la experiencia que tuve de joven, ser un excelente testimonio y cuando mis hijos crezcan, inculcarles una buena cultura.
¿Podrías dejar un mensaje para los lectores?
Dios nunca se olvidó de los jóvenes, de hecho, Él los utilizará para mejorar el país. Agradezco a Dios por haberlo conocido y ahora mi vida tiene sentido. Si cada persona sueña con algo bueno, teniendo fe en el Señor, las cosas saldrán de manera correcta. El Señor los ama, siempre estará al lado para darles una mano, así que aprovechen la oportunidad para salir adelante.
Por Aristides Arámbulo (17 años)