/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/YHA6R4LV5BHNVAQGYR2RFDZRQI.jpg)
Cargando...
SALTO DEL GUAIRÁ (Rosendo Duarte, corresponsal). Según confirmó el encargado de catastro de la Municipalidad, Mario Almada, solo el 30% de los lotes urbanos y el 20% de las propiedades rurales del distrito de Salto del Guairá están al día con sus impuestos inmobiliarios. El año pasado, la Comuna recaudó en dicho concepto G. 2.600 millones, cuando el monto debería superar los G. 12.000 millones cuanto menos, explicó.
Según Almada, este año empezaron a notificar masivamente a los propietarios evasores, pero se encuentran con otro problema: la gran mayoría ya vendieron sus lotes, pero el inmueble sigue figurando a nombre del primer comprador en los registros de la Municipalidad. En algunos casos se revendieron hasta tres o cuatro veces.
La Comuna abrió sumario sobre los casos presentados para que pueda terminar conociendo a los dueños actuales de los inmuebles y tratar de cobrar lo adeudado. Muchos dejan de pagar sus impuestos, y solo cuando necesitan para algún trámite pasan a abonar. Y aunque el contribuyente deba por diez años, la ley solo les obliga a pagar por los últimos cinco años, explicó el funcionario.
La situación se da en barrios antiguos de la ciudad, pero el mismo vicio empieza a repetirse en los nuevos loteamientos. Los propietarios de los terrenos no informan sobre las ventas que van realizando y su nuevo propietario no paga el impuesto inmobiliario.
“Lo peor es que la Municipalidad está invirtiendo grandes recursos para dotar a los nuevos barrios (loteamientos privados) de infraestructura, sin que los empresarios cumplan con la Comuna. Algunos ni siquiera transfirieron las calles y espacios públicos a la institución, pero utiliza a sus clientes para presionar por las obras”, resaltó el funcionario.
La Junta Municipal estudia la posibilidad de no volver a aprobar obras en barrios privados que no estén al día con la Comuna, a fin de que los evasores se pongan al día.
Salto del Guairá cuenta actualmente con un presupuesto propio de apenas G. 15.000 millones. Cálculos estimativos realizados dan cuenta que la institución podría llegar a triplicar dicho monto si llega a cobrar al menos el 80% de todos los impuestos y tasas que la ley les autoriza percibir.